El bar Xentes, mientras estuvo abanderado por un maestro de los fogones como Vicente -ya fallecido-, hizo méritos suficientes para pasar a formar parte de la más brillante historia de Vilagarcía de Arousa.
Tras un tiempo cerrado, aquel pequeño bajo en la esquina de la calle A Baldosa con Valentín Viqueira, fue restaurado y ampliado para convertirse en Stocolmo 2.0, una cafetería decorada con estilo e imaginación que tiene al frente a otro de los hosteleros con mayúsculas de la localidad, como es José Rodríguez Rodríguez, un carrilexo de adopción más conocido como "Pachi".
Variedad en la carta
Su local, en el que es fácil encontrar una variada carta de desayunos -dulces o salados-, vermús -ya sean gallegos, catalanes, vascos o italianos, como el Petroni, Nordesía, Yzaguirre, Miro, Dos Deus, Perucchi, Atxa, Casa Mariol y Stocolmo-, vinos, cócteles y un largo etcétera de artículos -además de buen café- ha irrumpido con fuerza en el día a día de la localidad vilagarciana, y no solo por la citada oferta hostelera, sino también por su evidente implicación cultural y solidaria.
Como ejemplo puede decirse que "Pachi" y su equipo han decidido apostar por el arte y colgar en sus paredes los cuadros de diferentes artistas.
Empezaron con Miguel Piñeiro Pérez y van a continuar mes a mes con otros conocidos personajes que, de este modo, van a tener la oportunidad de dar a conocer sus obras y obtener beneficios gracias a la venta de las mismas.
Pero eso sí, dejando una comisión a la cafetería que no va a quedarse en su caja, sino que será dinero destinado a diferentes organizaciones no gubernamentales, aportando así un pequeño pero importante grano de arena para ayudar a los vilagarcianos en situación desfavorecida.
Y tal ha sido el interés despertado por esta iniciativa, "con la que comparten con los clientes la creatividad, el arte y el alma de algunos de los pintores y escultores arousanos", que el calendario de exposición y venta de cuadros ya está cerrado para todo el ejercicio 2015, salvo que a "Pachi" se le ocurra algo más y se las apañe para dar cabida a nuevos artistas.
Otras posibilidades
Desde luego ingenio no le falta, como ha demostrado durante tantos años en el sector -muchos lo recordarán por la cafetería República-, tanto detrás de la barra como decorando y "poniendo a andar" diversos establecimientos hosteleros.
Por eso además de la iniciativa benéfica consistente en exponer y vender cuadros este hostelero promueve otras muchas actividades, entre ellas una que se lleva a cabo hoy mismo, cuando "tres firmas de ropa nos enseñan sus novedades a lo largo de todo el día", esgrimen desde Stocolmo 2.0, donde ayer incluso se grababa un videoclip y animan a sus clientes a "disfrutar de la experiencia" de hoy "tomando un café mientras se miran cosas bonitas".
