La vieja barandilla se reciclará para lugares del rural

La intención de Portos de Galicia es que la obra de sustitución de la barandilla del paseo marítimo de Vilaxoán pueda concluir a principios de julio siempre que las condiciones meteorológicas lo permitan y no surja ningún contratiempo. A simple vista los trabajos parece que avanzan a buen ritmo, pues ya se han colocado varios metros de balaustrada, similar a la de A Concha-Compostela con la mirada puesta en armonizar la fachada marítima de Vilagarcía. Por el momento no está decidido el color del que se pintará el hormigón.

Los operarios han comenzado la obra por el final de la playa (en sentido a Vilanova). La actuación proseguirá por el arenal para que, en caso de que surjan imprevistos, la parte del paseo que no está a nivel del arenal pueda contar con baranda de protección y así garantizar la seguridad de bañistas y viandantes. En las zonas en las que el paseo está a ras de la playa no se colocará balaustrada, sino una especie de bancadas bajas para que los vecinos y visitantes puedan sentarse y disfrutar del mar, una mejora que satisface a los vecinos de Vilaxoán.

La vieja barandilla, la cual no cumple la normativa actual para el desnivel existente en el paseo de Vilaxoán, no se tirará a la basura. Fuentes municipales confirman que se quedará en manos del Concello para reutilizar sus barrotes -por separado- donde sea necesario, como por ejemplo en el entorno del centro cultural de Rubiáns, de Cea o en las inmediaciones de la iglesia de San Antonio, en Faxilde.

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