Dos jóvenes grovenses, a punto de caer con su coche por un precipicio, en A Lanzada

Poco después de las tres de la tarde de ayer se produjo un accidente de circulación en O Grove que se saldó solo con daños materiales. Pero a punto estuvo de ocurrir una verdadera tragedia, ya que el turismo implicado, en el que viajaban dos jóvenes de la localidad, estuvo a punto de precipitarse por un terraplén con varias decenas de metros de altura.

Ocurrió a la altura del centro vacacional de A Lanzada -el antiguo sanatorio y futura Pousada-, cuando el turismo en el que viajaban los dos chicos avanzaba en sentido a Pedras Negras-Sanxenxo, es decir, se dirigía hacia el istmo para salir de la localidad grovense.

Por causas que se desconocen -se investiga si hubo exceso de velocidad- el conductor del coche perdió el control del mismo y se salió de la calzada, colisionando de forma violenta contra la valla metálica lateral y una farola. Fueron esos dos elementos los que salvaron la vida de los do ocupantess, ya que en caso contrario se habrían precipitado al vacío, sobre un grupo de pinos y prácticamente sobre las muy frías aguas de A Lanzada.

Los voluntarios de Protección Civil de O Grove que tuvieron que intervenir para despejar la zona, limpiar la calzada y proteger el tramo en el que rompió la barandilla, indicaron que "fue un accidente con un resultado casi milagroso", pues consideran que los dos chicos implicados en el suceso "pudieron haber perdido la vida, y sin embargo salieron ilesos y ahora pueden contarlo".