El IES de A Illa de Arousa ha sido cubierto con sábanas blancas pintadas con mensajes a favor de una enseñanza pública de calidad, una decisión que padres y alumnos tomaron porque creen que se van a perder actividades por el déficit de profesores de apoyo en disciplinas especiales que se impartían hasta ahora.

Alrededor de 30 personas, entre adultos y niños, permanecieron toda la noche del sábado y la mañana del domingo en el pabellón del colegio para confeccionar las pancartas con las que se cubrió todo el perímetro del colegio. "Fue una noche reivindicativa pero también con aires de fiesta en la que adultos y escolares participaron al unísono en la impresión de los mensajes que queremos trasladar a las autoridades", explica Dolores Folgar, que participó de forma activa "porque antes fui docente, pero ahora soy abuela de un niño que entra en primero de la ESO".

Así, en las sábanas se escribieron mensajes que tienen un alto contenido de protesta: "Luto polo ensino público", con un féretro y una cruz; "Educación polo mar abaixo"; "Pola boca morre o peixe" en alusión a la visita del delegado territorial Cores Tourís al centro escolar el pasado viernes.

También hay pancartas ilustrativas como el dibujo de una lata de sardinas, llena de niños, con el rótulo de "Conservas Ares", dirigido al delegado de Educación, Pérez Ares, "porque construyó un aula de 42 metros cuando el mínimo obligatorio es de 50 metros cuadrados", explica Lola Folgar.

El humor está asimismo presente con el mensaje dirigido al conselleiro de Educación, Jesús Vázquez, a quien invitan a un "relaxing cup" en A Illa, expresión que esta semana puso de moda la alcaldesa madrileña con ocasión de la candidatura de Madrid a los Juegos Olímpicos.

En definitiva, el colegio de A Illa comienza hoy el curso de los mayores con un tono de protesta, que los padres consideran imprescindible por los recortes que ya les afectan en estos momentos. "Peligra el curso del PCPI por falta de un profesor de apoyo, y también el Avalar del que tanto presume la Xunta y que obliga a abandonar las aulas de informática, por no hablar del inglés y otras actividades", expone la portavoz.

Todo ello llevó a la Anpa de A Illa a improvisar este fin de semana sus primeras movilizaciones, y anuncian que estudiarán más actos en defensa de una enseñanza de calidad.

La primera protesta fue de 24 horas y comenzó el sábado a las tres de la tarde, para la elaboración de las pancartas que desde ayer rodean el centro educativo. Las nuevas acciones serán determinadas por las Anpas en próximos días. "Fue una jornada reivindicativa pero también festiva porque participamos niños y adultos", destaca Folgar.

Por eso, además de trabajar en el diseño de las pancartas, "tuvimos música por la noche, hasta la una y media de la madrugada, porque han venido a solidarizarse los miembros de la asociación cultural Dorna que interpretó un variado repertorio de gaita".

Aunque quienes participaron en el encierro de un día fueron treinta personas, los organizadores aseguran que durante todo el día han recibido el apoyo de numerosas personas.

"No todo el mundo puede asistir a un encierro de 24 horas, pero fueron muchas las personas que han querido compartir un rato con nosotros porque se trata de una reclamación justa", señalan. Las clases en este centro de A Illa comenzaron el pasado viernes, con un retraso de tres días, por las obras que hizo la Xunta.