Un bar de la localidad meañesa de Lores, la "Taberna San Benito", sufrió durante la noche del lunes al martes de esta semana un intento de robo, el segundo en poco tiempo, por cuanto ya sufrió un intentona anterior hace dos meses.

El robo frustrado se produjo a las 3.07 horas de la madrugada, tal y como quedó registrado por la alarma del local que saltó cuando los ladrones trataron de acceder al interior tras forzar el bombín de la única puerta que da acceso al local.

El ruido de la alarma disuadió a los ladrones que pusieron pies en polvorosa toda vez que además el propietario del negocio, Javier Rosal, un vecino de Lores que vive a escasos metros del establecimiento hostelero se levantó de cama para presentarse en el bar cuando sintió la alarma. Al llegar se se encontró con la puerta forzada. Fueron los únicos daños que se produjeron en el establecimiento, pero el propietario admite que vive con la lógica preocupación derivada de que se repita el hecho en tan poco tiempo.

A primera hora de la mañana de de ayer martes presentó la correspondiente denuncia en el cuartel de la Guardia Civil de Sanxenxo, cuyos agentes levantaron el consiguiente atestado.

La Taberna San Benito es el único bar de la zona centro de Lores y responde a un negocio que Javier Rosal asumió hace un año en régimen de alquiler sobre un local que ya fuera bar hace unos años pero que entonces había cerrado sus puertas.

En los últimos meses los locales de hostelería se han convertido en un objetivo muy apetecible para los ladrones. Uno de los casos más graves se produjo antes de Navidad en Valga, pues tres hombres armados con una pistola accedieron al interior del bar de la playa fluvial de Vilarello, donde encañonaron a la concesionaria para hacerse con un botín de 700 euros. Finalmente, la mujer decidió cerrar el negocio, que el Ayuntamiento saca ahora de nuevo a concurso.