La concejala nacionalista Cecilia Tarela reconoció ayer que la reunión mantenida en la noche del lunes no sirvió para decidir si va a celebrarse la fiesta de la lamprea, ni si ésta tendrá lugar el 14 de abril o en otras fechas. Explica que a lo largo de esta semana se mantendrán otros encuentros, antes de concretar qué pasa con la celebración y si ésta alcanza la mayoría de edad o la 18 edición se cancela definitivamente. Hay que explicar que el lunes estaban convocados más de una veintena de hosteleros, pero apenas acudieron ocho. Se les planteo la posibilidad de organizar la degustación en los propios establecimientos pero no se llegó a acuerdo de ningún tipo.

A la espera de nuevas reuniones, el concejal independiente Luis Sabariz Rolán considera "patético" que a estas alturas no esté nada decidido sobre la fiesta. Censura que en reuniones como la del lunes solo participaran los tres ediles liberados del gobierno pero no así el alcalde, Álvarez Angueira, quien "tendría que abanderar las negociaciones en asuntos tan importantes como esta fiesta".

Sabariz termina diciendo que "esta indefinición del tripartito es preocupante" y recalca que a estas alturas no puede estar "completamente en el aire" una cita como la de la lamprea.

En otro orden de cosas, Sabariz denunció que "la práctica totalidad de las jardineras de la villa están sin plantas y en total estado de abandono".

Esto se debe, considera, a que "el equipo de gobierno sigue con la apatía y el desinterés de siempre por cuidar este tipo de detalles; al contrario que en otras villas las jardineras son meros estorbos que a juicio del gobierno local no sirven para nada".