El alcalde de Catoira, el socialista Alberto García García lamenta la actitud de lo que define como "cuatro exaltados que se empeñan en crispar la vida política y social de nuestro pueblo". Se refiere así a los incidentes vividos el lunes por la noche, tras el pleno extraordinario que había solicitado la oposición para que el regidor explicara todo lo sucedido con el edificio multiusos y, sobre todo, aclarase por qué no se pagó a la empresa Tragsa todo el dinero que se recibió en subvenciones.

Como ya se informó ayer, el alcalde ofreció las explicaciones que creyó oportunas, y tras leer los cuatro folios en los que había escrito su intervención, al terminar pidió a los concejales que votaran y levantó la sesión, sin que mediara debate.

Eso fue lo que generó el enfrentamiento verbal y gestual que pudo verse tras el pleno, ante lo cual García explica que "una vez más algunos de la oposición demuestran que no se enteran de nada y que protestan por protestar, pues lo que solicitaron PP y los nos adscritos (Compromiso por Galicia) fue un pleno extraordinario para 'dar cuenta de las obras del centro multiusos, de la financiación de las mismas y otros extremos, así como la creación si procede de una comisión de investigación', y eso fue exactamente lo que hice en el pleno, dar cuenta de absolutamente todos los trámites".

Dicho esto, "lógicamente después de que 'di cuenta' de todo, como me pedían, ya no procedía la comisión de investigación".

En cierto modo, lo que quiere decir García es que si el PP, por ejemplo, presentara una moción para su debate en un pleno ordinario para preguntar por el multiusos, el debate estaría garantizado, y los conservadores lo abrirían exponiendo sus criterios o razonamientos. Pero no lo hicieron así y lo que plantearon fue un pleno extraordinario -celebrado minutos después del ordinario- para solicitar que el alcalde "diera cuenta", y como queda dicho, así lo hizo. La jugada, evidentemente, irritó a Marcos Coira, el portavoz del PP, quien mostró su enfado a gritos.