A bordo del pesquero escuela "Chasula", que zarpa del puerto de Grove, o bien desde Punta Pateiro, también en la península grovense, es posible disfrutar de la presencia de las aves pelágicas, hacer seguimientos de las mismas y confeccionar estudios que contribuyan a su mejor conocimiento a nivel nacional e internacional.

La Sociedad Española de Ornitología (SEO/BirdLife), por medio de su delegación en la provincia de Pontevedra, y el proyecto Seabirds Galicia-Aves Marinas, que organiza periódicas salidas en barco hasta llegar a 12 millas náuticas de la isla de Sálvora, permiten comprobar también en verano la riqueza ornitológica de las Rías Baixas.

A modo de ejemplo, puede decirse que SEO-Pontevedra realizó hace días un nuevo recuento de especies que se desplegó simultáneamente en diferentes cabos de España y Portugal, al amparo de la Red de Avistamiento de Aves y Mamíferos Marinos (RAM).

Los participantes se situaron en la grovense Punta Pateiro, "bisagra entre las rías de Pontevedra y Arousa", y se encontraron con enormes dificultades para la observación de aves, a causa de los chubascos registrados.

Aún así, los ornitólogos y aficionados a la naturaleza que quisieron formar parte de esta actividad avistaron ejemplares de negrón común, pardela balear, alcatraz atlántico, págalo parásito, págalo grande y cormorán, tanto grande como moñudo.

Eso ocurrió el sábado pasado, pero es que la anterior observación, realizada el primer sábado de junio también en Punta Pateiro, SEO-Pontevedra avistó igualmente ejemplares de las especies antes citadas, al igual que individuos de charrán patinegro.

Es, como queda dicho, solo un ejemplo, pues Seabirds Galicia también se ocupa de localizar especies pelágicas. Este programa, abierto a todos los públicos y con fines tanto científicos como lúdicos y turísticos, hizo su última salida el 16 de junio. En aquella ocasión el mal tiempo impidió que el barco avanzara más allá de las 1,5 millas, al noroeste de Sálvora. Pero a pesar del "corto" recorrido avistaron "las primeras pardelas cenicientas (Calonectris diomedea) del año para Seabirds Galicia, así como una muy temprana pardela sombría (Puffinus griseus), fotografiada a placer cerca de las islas Sagres", explican los organizadores de estas singladuras.

Las mismas fuentes resaltan que "también se vieron tres delfines mulares (Tursiops truncatus) cerca de Cambados y destacó la presencia estival de vuelvepiedras (Arenaria interpres), cormorán grande (Phalacrocorax carbo) y gaviota sombría (Larus fuscus), estas últimas quizás individuos reproductores del archipiélago de Sálvora".

En Seabirds explican que ya tienen nuevas salidas programadas para este verano en las que aún quedan plazas disponibles. La primera el día 28, y con ella "esperamos ver algunos paíños de Wilson (Oceanites oceanicus) y buenos números de pardelas cenicientas (Calonectris diomedea) y baleares (Puffinus mauretanicus)".

Siempre si el tiempo lo permite, el 11 de agosto la tripulación del Chasula intentará centrarse en "el paso de charranes (Sterna spp.) y fumareles comunes (Chlidonias niger)", aunque también esperan buenos números "de paíños europeos (Hydrobates pelagicus) y quizás se observen los primeros págalos pomarinos (Stercorarius pomarinus) del verano".

El avance de calendario de Seabirds, que tiene como patrocinador al Grupo Naturalista Hábitat y cuenta entre sus expertos con el ornitólogo grovense Cosme Damián Romay Cousido, dice que el día 25 "quizás podría aparecer algún paíño de Madeira (Oceanodroma castro), o cuando menos los paíños de Wilson y europeo están casi garantizados, como también podría ser observado el págalo rabero (Stercorarius longicaudus)".

Una visita a las cigüeñas negras de Arribes del Duero

SEO-Pontevedra, que entre otras acciones realiza actualmente un estrecho seguimiento diario de la reproducción del chorlitejo patinegro en las playas de O Salnés –parece que con muy buenos resultados–, anuncia para los días 21 y 22 una visita a Arribes del Duero (Zamora).

Y convocan a participar a todos los interesados alegando que la peculiaridad orográfica de dicho lugar "hace posible la existencia de un microclima mediterráneo que contribuye a la diversidad vegetal y le convierte en un sitio perfecto para las aves; de ahí que nidifiquen en la zona 117 especies y que entre ellas se encuentren algunas en peligro de extinción, como la cigüeña negra". Pero también es un hábitat propicio para "el alimoche, águila real, águila perdicera, halcón peregrino y buitre leonado (...); riqueza que ha influido decisivamente en el planteamiento de declaración como ´Parque Natural de Los Arribes del Duero´", explican en SEO.