La cantidad de familias con niños menores a cargo que no pueden llegar a fin de mes por sus propios medios se ha disparado. Lo constatan los registros de las asociaciones de ayuda social, que superan las 2.800 peticiones de emergencia en las comarcas de O Salnés y Ullán a lo largo de este año.

Pocos días después de que Cáritas hiciese públicos los datos de sus actuaciones en los últimos 11 meses, la Fundación Amigos de Galicia ha hecho lo propio. Y a las 1.975 personas asistidas por el primer colectivo hay que añadir 809 más a los que el segundo ha ayudado mes a mes en O Salnés y Ullán. Pero el total de intervenciones de la fundación ha sido mayor, pues a esa cifra hay que sumar otras puntuales.

El pago de facturas y alquileres y los alimentos y artículos de primera necesidad, ropa, calzado y material escolar repartidos por Amigos de Galicia en los municipios arousanos y de Ullán asciende hasta el entorno de los 250.000 euros, que se traducen en 220.477,51 kilos de productos.

Por obvios motivos de población Vilagarcía absorbe la mayor parte de las peticiones realizadas a la fundación. En la capital arousana 77 familias y un total de 267 personas salieron adelante gracias a la colaboración de este colectivo a lo largo de este 2011, y a 72.766,25 kilos de productos para ellas se destinaron 82.155,45 euros. O Grove se sitúa en el segundo puesto del ranking, con 62 núcleos familiares y 202 individuos asistidos, seguido muy de cerca por Cambados, donde fueron 201 vecinos y 52 familias las que recurrieron a esta agrupación. El gasto en esas localidades fue de 62.207,69 y 61.899,74 euros respectivamente, y el peso total de los paquetes de 55.051,06 y54.778,53 kilos. En Meis se invirtieron 4.003,46 euros en ayudar a 13 ciudadanos de 5 familias, a los que se entregaron 3.542,89 kilos de alimentos y otros productos.

Amigos de Galicia realizó también actuaciones puntuales para ayudar a vecinos de los términos municipales de Vilanova de Arousa, Catoira, Meaño y Sanxenxo. Mes a mes repartió además fruta a Cáritas Interparroquial de Arousa, a las residencias de la tercera edad de Cambados y Vilagarcía y a la Asociación Con Eles.

El director de la Fundación destaca la importancia que los niños y adolescentes menores de edad tiene en sus cifras. Jesús Busto tiró del registro general de un colectivo que actúa en el conjunto de Galicia para apuntar que de los 18.627 gallegos atendidos 10.615 fueron menores. En este año las ayudas de emergencia dispensadas por este colectivo ha aumentado en 6.000 en la comunidad autónoma. El total de personas atendidas en 2010 fue de 11.957.

La enorme cantidad de paquetes de alimentos que cada día salen de la nave que la fundación tiene en Rubiáns, en Vilagarcía de Arousa, se debe en gran parte a los Fondos Europeos de Lucha contra la Pobreza y al Fondo Gallego de Garantía Agraria. Así, entre enero y noviembre del año en curso se distribuyeron en Galicia dos millones de kilos de alimentos perecederos, como pasta, leche, harina, azúcar, zumo, cacao, queso, leche de continuación y cereales infantiles, todos ellos gracias a la colaboración europea. Un millón de kilos de fruta y diversas cantidades de carne, pescado y productos congelados llegaron a través del Ministerio de Medio Rural.

Si el esfuerzo realizado es importante durante todo el año, con la llegada de la Navidad las necesidades se incrementan. Y es que la Fundación, igual que otros colectivos dedicados a prestar ayudas de emergencia a los que más lo necesitan, está empeñada en conseguir que estas fiestas sean especiales también para los que menos recursos económicos tienen.

Cada uno de los niños de cero a ocho años con cuyas familias colabora la entidad recibirá estas fiestas un juguete. A los mayores de hasta 12 años se les regalará un libro. El objetivo: que ningún niño de O Salnés, Ullán ni del conjunto de Galicia se quede sin regalo de Reyes. Además, los paquetes de alimentos de las próximas semanas incluirán turrones y otros dulces propios de las fechas y carne de pollo, que la fundación deberá adquirir con fondos propios, pues no figuran en su catálogo de donaciones habituales.

La colaboración de los departamentos de servicios sociales de los ayuntamientos de la zona es de vital importancia a la hora de poner en contacto a las familias con la fundación. Y un buen número de derivaciones llegan a Amigos de Galicia por esta vía. No menos importante es la colaboración con otras entidades del tercer sector, como la Cruz Roja o Cáritas Interparroquial, así como numerosos comedores sociales, asilos y centros de menores.

La fundación cuenta además con el esfuerzo de más de doscientos voluntarios y colaboradores que se encargan de tareas de diferente índole. Y de unos mil patronos, que asumen la importante tarea de detectar situaciones de necesidad y remitirlas a los técnicos municipales de servicios sociales. Éstos son los que realizan la evaluación de cada una de las demandas y determinan qué hacer en cada caso.