El edil del BNG de A Illa de Arousa, Carlos Otero se queda con la "llave" de la gobernabilidad durante una semana. hasta el mismo día del pleno de la investidura, el sábado 11 de junio.

Así, el alcalde en funciones, Manuel Vázquez y el candidato más votado en las pasadas elecciones, el popular Juan José González están condenados a sufrir la "intriga" sin saber a cuál de los dos corresponderá el bastón de mando.

"Ideológicamente estamos a distancias kilométricas tanto del PSOE como del PP", explica un Carlos Otero que se confiesa incapaz de tomar una decisión en uno u otro sentido, pues no le convence ninguna de las dos opciones ni tampoco las propuestas que le han hecho desde el pasado 22 de mayo.

La incertidumbre es mayor tras la celebración de la asamblea local del BNG reunida en la noche del jueves, por lo que en este órgano tampoco se encontró la solución razonable."Hemos planteado numerosas alternativas pero salimos de la reunión con más dudas todavía", explica Otero.

En esta semana, los nacionalistas isleños se reúnen con el secretario comarcal, Xan Allegue para tratar de buscar la salida más conveniente, a sabiendas de que "no existe ninguna".

Otero preferiría no tener que posicionarse, pero ello significaría que gobernase la lista más votada, es decir el PP, que consiguió en la cita del domingo 22 de mayo, 250 escrutinios más que el PSOE.

El edil frentista también cree que se traicionaría a sí mismo si vota continuidad y por tanto la investidura de Manuel Vázquez "que durante cinco años y medio ignoró al BNG y que ha demostrado ese mismo pasotismo con muchos vecinos".

Sabe que en una semana va a tener que posicionarse, de una manera u otra, y que ello va a significar reproches de una parte de los vecinos. "Salimos con tantas o más dudas de las reuniones que mantuvimos a nivel local y gallego", reconoce Otero.

Por su parte, el alcalde en funciones de A Illa, Manuel Vázquez mantiene la esperanza de que en las próximas horas se clarifique la postura del BNG y descarta de plano un gobierno de cohabitación de modo que el PSOE gobierne dos años y el PP otros dos.

El alcaldable del PP., Juan José González también confía en que el BNG opte por la abstención el día de la investidura "y deje gobernar a la lista más votada". "Somos conscientes de que el BNG no nos va a dar el voto pues las líneas ideológicas son opuestas", reconoce.

Juan José González también espera reunirse en esta semana con Otero u otros miembros del BNG con el fin de llegar a algún tipo de acuerdo.

"De momento no hemos hablado de nada en concreto porque estamos a la espera de que nos expongan su postura de voto. Si optan por la abstención se podrán concretar acuerdos", explica.

Juan José González tampoco descarta un pacto con el PSOE de modo que se divida el mandato. "Quizás así se restañarían algunas viejas heridas que existen en el pueblo", reconoce el edil popular.

Lo que sí dejó claro es que el PP va a respetar el "silencio" del BNG aunque "nos mantengan en ascuas hasta el último momento". Sin embargo, entiende que la abstención "sería una postura coherente" pues "en estos momentos, la dirección nacional del BNG no les obliga a pactar con el PSOE como ocurría hasta ahora".

Por eso, Carlos Otero, con 400 votos y un solo concejal tiene ahora la responsabilidad de decidir el mejor gobierno para A Illa de Arousa, con la tesitura de que "el PSOE no nos merece la más mínima credibilidad y del PP estamos muy alejados ideológicamente". Llega a afirmar que le va a costar mucho apoyar a un grupo socialista cuya política de los últimos años "ha sido caciquil, pues ha gobernado solo para los amigos". Tampoco ve viable que los otros dos partidos le den a él la Alcaldía, una opción que descarta casi de plano y que no contemplan sus futuros compañeros de corporación.

Otero también pone de manifiesto que la distancia con los ediles del PSOE y del PP es simplemente ideológica "pues a nivel personal somos amigos". "Tanto con Juan José Vázquez como con Genito Otero y Manuel Vázquez me llevo muy bien a título personal", confiesa.