Payasolandia arranca sonrisas y aplausos entre el público vilagarciano

No era el circo, pero había payasos, acróbatas y lanzadores de cuchillos. Tampoco era la televisión, pero estaban Shin Chan, Homer y Bart Simpson, Bugs Bunny, Epi y Blas y Tom y Jerry. Era el Auditorio de Vilagarcía, y Payasolandia la compañía responsable de un espectáculo que encandiló al público del municipio y que consiguió arrancar risas y aplausos entre los más jóvenes.

Multitud de familias vilagarcianas aprovecharon la oportunidad de pasar un domingo de magia y humor con un número que no defraudó. Payasolandia atrapó desde el principio a los niños gracias a un espectáculo cargado de contenidos educativos y en el que no faltaron tampoco las canciones y bailes en directo. Distintos personajes conocidos fueron pasando por el escenario para hacer reír a los más jóvenes al mismo tiempo que les enseñaban hábitos como pedir permiso antes de entrar en una habitación. La ilusión en los ojos infantiles dio muestra de la calidad de la función de una familia dedicada al circo desde el siglo XVIII.