Buenas mareas, el mar en calma –dicen que "como un plato"– y ausencia de viento y de lluvia. Con esta condiciones la jornada de ayer resultó óptima para la recolección de mejilla en todo el litoral gallego, de ahí que los bateeiros dieran un acelerón importante a la campaña.

A la espera de que la Consellería do Mar decida, pues una buena parte del sector solicita la eliminación de la veda, porque se cree conveniente poder extraer la semilla del mejillón en cualquier momento del año, son muchos los bateeiros que aprovechan esta época para recorrer prácticamente todo el litoral, tanto en las Rías Altas como en las Rías Baixas.

De ahí que ayer se observara una frenética actividad en zonas rocosas como las de A Lanzada y San Vicente –en los concellos de Sanxenxo y O Grove–, pero también en Monte Louro (Muros) y el entorno de Cabo de Udra (Bueu).

Los bateeiros trabajan tanto por mar, con ayuda de planeadoras, como por tierra. Independientemente del municipio al que pertenezcan o del puerto que utilicen habitualmente, se desplazan a veces varios cientos de kilómetros –con las planeadoras en el remolque de sus vehículos– en busca de las mejores zonas de producción de cría, y parece que este año hay mucha "y de la buena".

El objetivo es "raspar" las rocas para extraer la semilla del molusco y trasladarla a las bateas, donde es "encordada", es decir, donde se sujeta con ayuda de una fina red biodegradable a las cuerdas que cuelgan de los parques de cultivo flotantes.

"Pocas veces nos encontramos un tiempo tan favorable como éste", indicaba ayer uno de los bateeiros que extraían mejilla, quien además confirmaba que "en días como hoy hay gente por todas partes" y apostillaba que los últimos temporales "hicieron que se perdiera mucha cría".