El cuatripartito de O Grove pretende convocar a los grupos políticos de la oposición y a los colectivos sociales y empresariales de la localidad –incluidas las comunidades de montes– para analizar entre todos el plan del litoral y hacer un frente común que defienda la singularidad de la península meca.

Así lo anuncia el alcalde, el socialista José Antonio Cacabelos Rico, convencido de la importancia de "trazar una línea estratégica propia" que defienda los intereses generales de todos los grovenses frente a posibles restricciones.

Y es que en un Concello prácticamente rodeado por la Red Natura, con zonas consideradas Lugar de Interés Comunitario, con espacios amparados por el convenio internacional de Ramsar para humedales y con otras muchas figuras de protección, aplicar ahora un plan del litoral restrictivo puede suponer "un problema insalvable para todos", advierte el alcalde.

Buscar consenso

De ahí su intención de fomentar un acuerdo consensuado "que trace los usos y protecciones propios de la ley del litoral, pero atendiendo siempre a la singularidad de O Grove y entendiéndose que nuestro pueblo necesita prosperar".

Lo que quiere decir es que "O Grove debe ser tenido en consideración como si de una isla se tratara para garantizar la protección del litoral sin que ello menoscabe la calidad de vida de los ciudadanos, es decir, buscando un punto de equilibrio y compatibilización entre protección y desarrollo".

Esta convocatoria de grupos políticos y colectivos sociales y empresariales es la respuesta del cuatripartito a "una especie de encuesta muy enfarragosa que nos remite la Xunta en relación con el plan del litoral, por lo que consideramos que debe ser el conjunto del pueblo y todos sus sectores los que se posicionen".

Curiosamente también se posicionaron ayer sobre este asunto diversos vecinos de la localidad que quieren saber qué va a hacer el cuatripartito en relación con el plan del litoral.

Esos ciudadanos mecos solicitan expresamente que se convoque a los colectivos sociales y empresariales, al tiempo que alegan que "entre la Red Natura 2000, Costas y otras figuras, resulta que tenemos el 30% del pueblo afectado, a pesar de lo cual seguimos sin estar informados sobre lo que podemos hacer y cómo nos benefician a nosotros esas protecciones, pues lo único que tenemos claro es que en la Red Natura no podemos construir ni plantar una finca de patatas".

Lo que quieren los vecinos es que las figuras de protección "no atenten contra la calidad de vida de los grovenses, pues nuestro Concello ya está hipotecado desde hace mucho y no puede estarlo todavía más".

Los ciudadanos que ayer mostraron su preocupación indican que "en caso de aplicarse un plan del litoral que no resulte flexible o permisivo en O Grove, prácticamente todo nuestro Concello pasará a ser una reserva natural, y en ese instante vivir aquí será imposible".