Los casi cincuenta trabajadores de la empresa Áridos del Umia, ubicada en la parroquia de Santa María de Paradela, término municipal de Meis, han expresado su preocupación por el futuro de esta firma que podría cerrar si se queda sin la cantera que está afectada por el trazado de la autovía de Vilagarcía a Pontevedra.

Se trata de una empresa que tiene cuarenta años de vida en esta comarca y sus trabajadores son mayoritariamente vecinos de la zona. Varios de ellos llevan muchos años de antigüedad y están en una edad en la que les sería difícil conseguir otro empleo. Esta situación hace que se viva con mayor intensidad la incertidumbre sobre el futuro de la actividad industrial.

En esta empresa de áridos que se encarga de la explotación de la cantera de A Goulla, ya han trabajado varias generaciones de vecinos del municipio de Meis y de los ayuntamientos del entorno.

Los trabajadores han decidido salir en la defensa de sus puestos de trabajo y presentar alegaciones al estudio informativo de la autovía de Vilagarcía a Pontevedra (que quedaría en la zona de Curro, término municipal de Barro) que se encuentra en la actualidad en fase de exposición pública.

La plantilla, asesorada por la federación Fecoma, del sindicato Comisiones Obreras, se reúne en asamblea esta mañana a las 7.30 horas, antes del inicio de la jornada laboral para decidir las medidas y acciones a adoptar en defensa de los puestos de trabajo de Áridos del Umia. Entre estas medidas figura la presentación de alegaciones contra el trazado que afecta la cantera.

Los trabajadores comparten la preocupación con la dirección de la empresa y con la Comunidad de Montes de Santa María de Paradela, propietaria de la cantera, dado que produciría importantes pérdidas económicas en todo el entorno.

Los comuneros están dispuestos a presentar alegaciones con un trazado alternativo que desviaría la autovía unos 100 metros hacia el monte con el fin de salvar la cantera de A Goulla.

De conseguir el visto bueno de la Consellería de Política Territorial para incorporar el desvío que se proponen los afectados esperan que el alejamiento de la nueva vía de comunicación a esta distancia resulte suficiente para poder continuar con la explotación de la cantera.

Los comuneros de Santa María de Paradela celebrarán el próximo domingo una asamblea vecinal para decidir sus propias alegaciones al trazado de la autovía de Vilagarcía.

En estas alegaciones también incluirán la cantera de A Moroza, por la que pasará la autovía de forma subterránea y que afecta a una parte importante de la cantera. En este caso están haciendo consultas con los técnicos porque la solución parece más difícil, dada la zona elegida en el estudio informativo de Política Territorial para cruzar el río Umia con un viaducto para introducir la autovía por los terrenos de la parroquia de Baión (Vilanova) hasta llegar al nudo de comunicaciones de Godos, en Caldas de Reis.