La llegada del verano provoca en Vilagarcía un incremento del 15 por ciento en el consumo de agua y en el tonelaje de basura generada, según datos correspondientes al último año facilitados por fuentes municipales.

Esta cantidad sirve para cifrar, aunque sea de forma aproximada, el incremento de la población durante el período estival. Curiosamente, el porcentaje es inferior al de años anteriores cuando la extrapolación fijaba el incremento en un turista por cada cinco residentes (20%).

El aumento en el consumo de agua es, por razones obvias, una constante cada verano. No sólo por el crecimiento de la población sino por la demanda que provocan el aumento de higiene derivado del calor y la playa y la necesidad de regar de forma "artificial" jardines y cultivos.

En 2004, la media mensual del trimestre vacacional (entre julio y septiembre) fue de 337.594 metros cúbicos, frente a los 289.167 del primer trimestre, los 317.891 del segundo y los 276.739 del último. Es decir, en verano la media de consumo diario es de 11.253 metros cúbicos y en los meses de invierno tan solo de 9.820.

La diferencia entre invierno y verano es ligeramente superior en el caso de los kilos de basura generados. En el trimestre comprendido entre junio y septiembre de 2004, la empresa responsable de la limpieza en el Concello de Vilagarcía recogió 4.295.100 toneladas de residuos orgánicos, es decir, los que se depositan en los contenedores verdes y por tanto no se reciclan. La cifra es un 16.13% superior a la media de los tres trimestres restantes: 3.698.333 toneladas.

Estas cantidades suponen que, mensualmente, los vilagarcianos generan 1.232.777,6 toneladas de basura o lo que es lo mismo 41.092 toneladas al día. Las cifras se incrementan en el trimestre veraniego hasta las 1.431.700 toneladas mensuales (47.723 al día).

El incremento se reduce considerablemente en el caso del material de reciclaje. Según los datos facilitados por el concello vilagarciano, los visitantes reciclan en menor medida que los residentes ya que su presencia en el municipio, que incrementa un 16% la basura generada, apenas eleva un 5% las toneladas recicladas, es decir, el incremento en la basura que se recicla es tres veces inferior al de la orgánica.

En concreto, los envases aumentan un 5,41% y el papel un 4,18. Cabe resaltar que el verano no es la época con mayor tonelaje de papel reciclado. El liderazgo lo ostenta el período navideño cuando, la vorágine de las compras y los regalos, incrementa el uso del papel y las cajas de cartón.

Así, la media de papel y cartón reciclado en el último trimestre del año es de 47.086 toneladas mensuales, frente a las 44.898 del resto del "invierno" y las 46.778 del trimestre comprendido entre julio y septiembre.

Los envases de plástico sí mantienen la tónica general y se incrementan durante el verano, aunque de forma poco significativa. Según los datos municipales, en el trimestre a estudio se generaron 112.980 toneladas, lo que supone una media mensual de 37.660. El resto del año la media rondó las 35.724 toneladas, lo que supone un incremento, coincidiendo con el aumento poblacional veraniego, de cinco toneladas por cada cien.

Electricidad

Caso aparte supone el suministro eléctrico. A pesar del aumento de población en verano, el consumo de energía se reduce entre junio y septiembre. Las razones son obvias: Las horas de sol que se "ganan" en los días de verano merman el recurso a la luz artificial, no sólo en los hogares sino también en el alumbrado público y en las industrias.

El consumo fabril se ve reducido también por las vacaciones estivales que, en muchas empresas provocan un receso de actividad, sobre todo en agosto.

Con respecto al alumbrado público, la norma en el Concello de Vilagarcía en invierno es encenderlo a las seis de la tarde y mantenerlo operativo hasta las nueve de la mañana siguiente. Sin embargo durante los meses del verano la franja horaria se reduce. Las farolas empiezan a alumbrar a las diez de la noche y se desconectan a las siete de la mañana.

El consumo de agua se redujo este año respecto a ejercicios anteriores

A falta de datos definitivos de 2005, en los primeros cinco meses del año se constata una reducción permanente del consumo de agua respecto al ejercicio anterior. Así, en enero de 2005 fueron 268.093 los metros cúbicos consumidos frente a 289.639 del mismo mes del año anterior. En febrero 253.768 frente a 283.448. En marzo 290.729 frente a 294.416. En abril 277.307 frente a 291.583 y en mayo 292.855 frente a 311.918.

Esta tónica vendría a corroborar el descenso en el consumo que se había registrado durante el ejercicio anterior. Según datos de Espina y Delfín, la empresa concesionaria del servicio en el municipio, los vilagarcianos incrementaban su consumo cada año desde 1998.

Ese año los vilagarcianos consumieron 92 litros por segundo frente a los 99 de 1999, los 100 de 2000, los 114 de 2001 y los 117 de 2003. Sólo 2004 protoganizó un ligero descenso con 116 litros por segundo que, de confirmarse, la tendencia de los cinco primeros meses, seguirá bajando en el año en curso.