Faro de Vigo

Faro de Vigo

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Mega Purple Sex Toy Kit: de largo tras 15 años en directo

La banda formada en 2003 a partir de las "cenizas" de varios grupos gallegos de influencia sesentera presenta por fin "Good vibrators", un LP que busca ofrecer otra forma de disfrutar de su experiencia en directo sobre los escenarios

Integrantes de Mega Purple Sex Toy Kit, en una foto tomada en 2003. // Merchi Mayo

En el mundo de la música primero suele ir el disco y luego la gira de conciertos para promocionarlos. Los integrantes de Mega Purple Sex Toy Kit, que se reunieron hace 15 años después de que sus respectivas bandas desaparecieran y que desde hace un tiempo solo se reúnen para tocar en eventos ocasionales, lo han hecho al revés por circunstancias de la vida, y llegan a su primer LP, "Good Vibrators" (Roctopus Records) con la experiencia más que demostrada sobre los escenarios. Y aunque no es lo mismo el directo que un vinilo, explica Alfonso Espiño (que se encarga de las voces y que llegó al grupo procedente de "Contrastes"), el disco "suena espectacular". "El directo de Mega Purple Sex Toy Kit, para bien o para mal, es único y no creo que pueda ser recogido a nivel de excitación de grupo y público ni en los surcos de un vinilo ni en ningún otro formato, pero del disco estamos orgullosos. Creemos que es una buena manera, o al menos distinta, de acercarse a nuestras canciones", dice.

¿Y por qué 15 años después? Alfonso Espiño, cuyo otro proyecto principal,"Espiño", está nominado a los premios Martín Códax al lado de Eladio y los Seres Queridos o "Novedades Carminha", resume su compleja génesis, que se resume en cuatro estudios en varias localidades en estos 14 años, incluido el Mystery Room Mastering de Milwaukee (Wisconsin), "que masterizó todo el material" y logró "darle esa coherencia después de las diferencias temporales y espaciales", señala. Tras tomar parte en varios CD recopilatorios y algún intento de EP que no salió, dedicieron "compilar todo el material, seleccionando el de mayor calidad" y en 2015 entraron a grabar en los Estudios Montealto de A Coruña otros temas "que formaban parte de repertorio de la banda desde siempre, pero que solo se podían escuchar en directo hasta el momento". Así completaron un LP largo, que presentaron oficialmente en directo hace una semana en la sala Sónar (Santiago) y hoy en Carballo. "Siempre", destaca, "se usaron instrumentos y amplificación analógica" y las canciones originales (de Espiño, David Cobo, Uxío Solla o Marcos Santomé) fueron compuestas en torno a la misma época.

Mega Purple Sex Toy Kit está formado ahora por Marcos Santomé (bajo, Los Yetis), Uxío Solla (guitarra), Fernando Vilaboy (Hammond, Elephant Band), Ramón Saleta (batería, Elephant Band, Meu) y Alfonso Espiño (voz), pero por sus filas pasaron también Emilio Prieto (batería original) y David Cobo (voz antes que Alfonso). "Todos", dice, "teníamos grandes influencias de la música y la cultura de los años 60, principalmente británica". Las "influencias sixties son la base preexistente de los miembros" de la banda "ya antes de su creación", prosigue, y recuerda que la psicodelia es parte de ellas y "resulta cómoda" al grupo porque es "un estilo abierto y da alas a la experimentación". "A todos nos encanta la música de Syd Barrett, The Attack, Billy Nichols o Love", por citar a algunos, comenta. Entre sus proyectos, Espiño destaca cómo el de MPSTK le aporta "una potencia incomparable". Recuerda cómo en la primera época eran "más arrogantes y hedonistas" y ahora son "un grupo de amigos a los que les gusta verse para actuar de vez en cuando y darle una patada en el culo al melindrismo musical imperante en el "pop" contemporáneo".

Y mientras tanto, Alfonso Espiño fue nominado por segunda vez (la primera fue en 2014, con Los Chavales, y ahora con Espiño) a los premios Martín Códax en la categoría indie-pop, lo que para el autor compostelano es una muestra de que "la gente relacionada con la musica pop en este país" sabe que lleva trabajando "este género desde hace muchos años con "cariño y trabajo" y "pocos apoyos". "No soy una superestrella de la musica gallega ni tengo una agencia potente detrás", alega, por lo que estar al lado de artistas "consagrados" significa, apunta, que en cierta medida ya ganó y supone un respaldo para seguir haciendo música "al margen de modas, sectas y lobbys e intrigas de promotores y particulares".

Compartir el artículo

stats