El concello lucense de Ferreira de Pantón se ubica en pleno corazón de la Ribeira Sacra con sus magníficos miradores. Puede presumir de naturaleza y de albergar una de las joyas románicas de esta geografía sagrada, el monasterio de las Madres Bernardas, primero benedictino, luego cisterciense. Cuenta con la peculiaridad de ser el único de toda Galicia que conservó su función desde su creación hasta hoy, sin que tuviera que desalojarse tras la Desamortización de Mendizábal.
La riqueza monumental y artística de este enclave se conjuga en perfecta armonía con el paisaje. El románico en Ferreira de Pantón -al igual que en toda la Ribeira Sacra- alcanza una de sus más altas cotas. Pantón es también tierra de vino, donde se cultiva uno de los caldos más afamados de Galicia, el de Amandi.
La antigüedad del poblamiento de este municipio lo atestiguan los más de catorce asentamientos castreños hallados, pero es en el legado religioso en el que destaca especialmente. El monasterio cisterciense femenino más antiguo de Galicia fue fundado en el siglo X y conserva una espléndida iglesia románica. La fachada principal del convento, adyacente al templo, pertenece a la primera mitad del siglo XVIII. Del conjunto destaca la extensa zona dedicada a celdas y las numerosas chimeneas. Ocupan el espacio conocido como "das donas", las antiguas habitaciones de las religiosas nobles. El edificio, de dos pisos, está realizado en sillares de granito, con un claustro de dos cuerpos y arcos de medio punto. Aquí está el sepulcro de la condesa doña Fronilde, abadesa del monasterio durante su época de mayor esplendor en el siglo XII. El monasterio es visitable todos los días y cuenta con hospedería.
La iglesia está ubicada formando un ángulo recto con la fachada del monasterio. Es de plata rectangular, con una sola nave y ábside semicircular. En el interior destaca una escultura en madera policromada de la Virgen con el Niño. También están los sepulcros de don Diego de Lemos, líder de las revueltas irmandiñas, y su hijo.
Otros edificios religiosos de interés en la zona son la iglesia de San Vicente de Pombeiro, la de San Miguel de Eiré o la de San Esteban de Atán, entre otras. En la capital municipal se encuentra el edificio del Ayuntamiento, situado en la Praza do Concello, ubicado en el que fue un hermoso pazo del siglo XVII.
La ruta del románico de Ferreira es conocida pero no lo es tanto su patrimonio civil, que merece la pena visitar. Entre los inmuebles destaca el castillo de Maside, ejemplo de arquitectura defensiva medieval con un pazo adosado y una torre del homenaje cuadrada y almenada.
