Hay dos cosas que anuncian irremediablemente la llegada del verano. La primera es el posado en bikini de Ana Obregón, que ya se ha consumado (en una conocida revista). La segunda, incluso con más efectos especiales que la primera, es el estreno de una nueva entrega de "Piratas del Caribe", que en España se produjo ayer a las 18.00 horas. Estas son algunas de las claves del que será, muy probablemente, el taquillazo estival, pese a haber sido robada por piratas informáticos.
El argumento. Para muchos, lo de menos. Nos presenta a un capitán Jack Sparrow en horas bajas y perseguido por el aterrador Capitán Salazar (Javier Bardem) y su tripulación de piratas fantasmas que han escapado del Triángulo del Diablo y están empeñados en matar a todos los piratas que surquen los mares.
La única esperanza de supervivencia de Sparrow es el legendario Tridente de Poseidón. Pero para encontrarlo deberá forjar una complicada alianza con Carina Smyth (Kaya Scodelario), una hermosa y brillante astrónoma; y con el testarudo Henry (Brenton Thwaites), un joven marinero de la Marina Real británica.
Javier Bardem. El actor español se ha roto la cara, literalmente, para encarnar al capitán Salazar, ya que tuvo que someterse a sesiones de maquillaje de tres horas para lucir un cutis horripilantemente cuarteado (y sin quejarse nunca, según asegura el productor Jerry Bruckheimer).
Conocido como "El Matarife del Mar", Salazar comanda una aterradora tripulación de muertos vivientes. Destaca por su demoníaca ferocidad y -quién lo iba a decir- por su lealtad a la Corona española.
Regresos y novedades. Geoffrey Rush, presente desde el principio de la saga (2003), vuelve a encarnar al capitán Barbossa, y regresan Orlando Bloom y Keira Knightley como Will Turner y Elizabeth Swan. Kaya Scodelario (Carina Smyth) y Brenton Thwaites (Henry) son las dos principales novedades del reparto, además del cameo del exbeatle Paul McCartney.
Dos directores. Dirigen esta quinta entrega los noruegos Joachim Rønning y Espen Sandberg, nominados al Óscar a la Mejor Película de Habla No Inglesa por "Kon-Tiki" (2012).
Piratas "pirateados". No hay constancia de que los piratas informáticos que supuestamente robaron la película hayan cumplido su amenaza y hayan filtrado fragmentos del metraje, después de que Bob Iger, presidente de Disney, manifestara su resolución de no pagar el rescate en bitcoins que exigían.
Casi novecientas pantallas. "Piratas del Caribe: La venganza de Salazar" se verá en 892 pantallas, de las que 724 serán 2D con doblaje al castellano. Se trata del tercer despliegue más potente de Disney, solo superado por "Star Wars: el despertar de la fuerza" (2015), récord con sus 1.400 pantallas, seguido de "Rogue One" (2016), también de la saga galáctica, con mil. Las cuatro películas anteriores han recaudado casi 3.300 millones de euros y, si los vientos de la taquilla no cambian, habrá una sexta.
