Seguro que más de una vez te has encontrado con alguien que lleva la webcam de su portátil tapada con una pegatina y has pensado que era una paranoia sin sentido. Pero la realidad es que no es una idea tan descabellada.

La webcam de un ordenador siempre es mejor tenerla tapada. La manera más sencilla y barata de hacerlo es cubrirla con una pegatina de un trozo de cinta adhesiva. Esta solución que parece tan simple es la más eficiente para bloquear la webcam.

Pero, ¿por qué hay que tapar la cámara del ordenador? Lo peor de todo es que espiar la webcam de un ordenador es más fácil de lo que parece. En la actualidad existen infinidad de softwares maliciosos especializados en recoger información de ordenadores ajenos que activen su webcam cuando estén infectados.

Lamentablemente los troyanos especializados en este tipo de ciberespionaje, los "creepware", son demasiado populares. Estos softwares actúan a través de las funciones que les ofertan las RATs (Remote Administration Tools), una herramienta de control remoto conocidas como "ratas".

Las grabaciones que los ´hackers´ obtienen al espiar a sus víctimas son expuestas en cientos de foros y páginas web, convirtiéndose en un auténtico negocio ilegal. Sin embargo, existen otros casos en los que las imágenes obtenidas a través de las webcams se convierten en un arma para extorsionar a compañeros de trabajo, de clase, amigos, etcétera.

Uno de los casos más recientes de este tipo ciberespionaje fue el que sufrió Cassidy Wolf, Miss Estados Unidos adolescente, en 2014. La joven modelo fue espiada a través de su webcam durante más de un año por Jared James Abrahams, un compañero de instituto.

Abrahams envió un inquietante mensaje a Cassidy en el que la amenazaba con publicar en Internet fotos suyas desnuda que había tomado en la intimidad de su habitación. La joven no se amedrentó y denunció a su acosador y la policía tuvo tiempo de cazarle antes de que las imágenes vieran la luz.

Lo peor de este caso es que Jared Abrahams había utilizado un "creepware" llamado BlackShades que se puede adquirir en Internet por sólo 35 euros y para el que no se necesita ningún conocimiento de hacker. Con sólo instalar este polémico software en tu ordenador podrás tener acceso a la webcam, los ficheros y a todo lo que la persona que desees espiar busque.

Michael Hogue, uno de los creadores de BlackShades, fue detenido en 2012 y se rumorea que su colaboración con el FBI permitió la detención de más de 100 hackers, entre los que se encontraba Alex Yucel, otro de los creadores del "creepware".

No sólo espían los delincuentes, también los gobiernos

Este tipo de espionaje es más común de lo que se cree y, aunque parezca ciencia ficción, no sólo los delincuentes lo realizan, también los gobiernos. Hoy en día, a los servicios de inteligencia les resulta más fácil hackear un ordenador que instalar micrófonos y cámaras en la casa de un objetivo.

El exempleado de la NSA (Agencia de Seguridad Nacional) Edward Snowden denunció en sus documentos filtrados que la agencia norteamericana tiene en su poder herramientas especializadas en capturar imágenes de las webcams de los ordenadores.

Según Snowden, para tomar el control de los ordenadores la NSA utiliza una aplicación llamada GUMFISH (para acceder a las cámaras) y otra denominada CAPTIVATEDAUDIENCE (para controlar los micrófonos y grabar conversaciones).

No sólo las webcams están en peligro

El tipo de softwares que utilizan esto ciberdelincuentes no sólo accede a las webcams instaladas en los ordenadores o a las que conectas a tu PC mediante un USB. Estos "creepwares" son también capaces de controlar las cámaras de seguridad que muchas personas utilizan para proteger su casa, su oficina o la habitación de un bebé.

Si te inquieta que alguien espíe tu webcam entonces olvídate de las Smart TV. Muchos de los nuevos televisores inteligentes están equipados con cámaras por las que se han dado casos de espionaje.

Además, los softwares utilizados para controlar las cámaras de un ordenador también pueden robar dato, claves y hasta cuentas de correo o de redes sociales. Por esto estos "creepwares" se suelen utilizar también para suplantar la personalidad o robar dinero.