Incorporar alimentos como el cacao natural a la dieta aporta un importante efecto cardioprotector y ayuda a controlar los principales factores de riesgo, como la hipertensión arterial o el colesterol, tal y como han asegurado expertos del Observatorio del Cacao, coincidiendo con la celebración del Día Mundial del Corazón (29 de septiembre) y del Día Mundial del Cacao (1 de octubre).

Y es que, tal y como ha informado el presidente del comité científico del Observatorio del Cacao, Ramón Estruch, varios estudios han evidenciado que un consumo regular estimula la producción de óxido nítrico, que es un potente vasodilatador, mantiene la elasticidad de las arterias, actúa contra la hipertensión y mejora el perfil lipídico.

Se trata, además, de uno de los alimentos con mayor contenido en polifenoles, los cuales son componentes bioactivos, con una gran capacidad antioxidante y antiinflamatoria, los responsables de los beneficios del cacao sobre la salud, especialmente la cardiovascular.

Los polifenoles ejercen un efecto vasodilatador, dilatando las arterias y manteniendo la elasticidad de los vasos sanguíneos, lo que favorece la circulación y, por tanto, ayuda a prevenir la hipertensión arterial, actualmente el principal factor de riesgo cardiovascular.

El cacao ayuda a mantener la elasticidad de los vasos sanguíneos

Además, la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria defiende el papel del cacao en el mantenimiento de la elasticidad de los vasos sanguíneos y, por tanto, su utilidad en la prevención de la hipertensión y, en consecuencia, de la arterioesclerosis.

"El cacao es muy rico en un tipo de polifenoles, los flavonoides. Y, dentro de los flavonoides, los flavanoles son los encargados de estimular la producción del óxido nítrico, que dilata los vasos sanguíneos. Las propiedades antiinflamatorias de los polifenoles del cacao son muy importantes, ya que la inflamación es la base de muchas enfermedades crónicas. A mayor cantidad de polifenoles, mayor protección frente a enfermedades cardiovasculares, pero también frente al cáncer o el deterioro cognitivo", ha recalcado Estruch.

Por otra parte, prosigue, los flavonoides del cacao también mejoran el funcionamiento de las plaquetas y pueden ejercer un papel protector frente a la trombosis. Es más, en combinación con otro componente del cacao, la teobromina, pueden reducir el colesterol de forma significativa (gracias al ácido esteárico, su principal componente graso), elevando el colesterol protector o HDL. Otro tercio de la grasa que contiene el cacao es el mismo ácido que se encuentra en el aceite de oliva, el ácido oleico monoinsaturado, que reduce el colesterol total y el colesterol perjudicial o LDL.

Todas estas propiedades convierten al cacao en un candidato ideal para entrar a formar parte de la nueva dieta mediterránea, considerada una de las más beneficiosas para la salud cardiovascular. "Existen multitud de fórmulas para incorporar al cacao en nuestra dieta diaria y salir ganando en salud cardiovascular", ha zanjado la autora del libro 'Detox SEN para estar sanos por dentro y bellos por fuera', Nuria Roura.