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La vista tiene sus enemigos

Una prolongada exposición a la luz LED de las pantallas electrónicas puede comprometer la salud visual, al igual que el sol, el tabaco y los alimentos ricos en grasas

Un grupo de jóvenes, usando sus móviles.

Fatiga visual, síndrome del ojo seco, miopía, cataratas y presbicia tempranas y degeneración macular asociada a la edad (DMAE o DME) son algunos de los problemas que puede provocar la exposición prolongada a la luz LED, luz que emiten dispositivos electrónicos como el móvil, la tableta y el ordenador. Y aunque su uso es relativamente reciente, ya hay numerosos estudios que alertan sobre los efectos nocivos que el abuso -y no el uso- de estos aparatos puede tener en la salud visual. De hecho, los especialistas alertan de la aparición de presbicia a edades cada vez más tempranas y de un aumento en los casos de miopía en niños y adolescentes. Es más, según el Colegio Oficial de Ópticos-Optometristas de Galicia, siete de cada diez gallegos precisan algún tipo de compensación óptica para ver mejor.

"La vista del ser humano ha evolucionado para ver de lejos y con luz natural. Sin embargo, la mayor parte del tiempo lo hacemos de cerca y con luz artificial, lo que supone un gran esfuerzo para el sistema visual, que no se ha adaptado al uso que hacemos de él. Este esfuerzo es aún mayor si se mira a una superficie que irradia luz, como es el caso de móviles, tabletas y ordenadores, y si estamos leyendo tres, cuatro horas textos en letra tan pequeña como los del whatsapp. Todo esto puede derivar en trastornos oculares e incluso neurológicos", explica Eduardo Eiroa, presidente de este organismo colegiado.

El óptico-optometrista advierte de que los trastornos derivados de la exposición prolongada a la luz LED es mayor aún en los niños, más cuanto más pequeños, ya que su sistema visual está aún formándose. Y no solo puede comprometer su visión; también su desarrollo cerebral y físico. "Hay estudios que constatan que el uso de dispositivos electrónicos altera el ritmo de sueño del niño, lo que afecta a su desarrollo cognitivo", afirma el especialista, que recomienda que los niños menores de tres años no tengan acceso a estos dispositivos, ya que su sistema de enfoque se podría alterar. Para el resto de la población, aconseja reducir al máximo el tiempo de exposición y en el caso de que esto no sea posible, proteger las pantallas con filtros adecuados y descansar la vista un minuto cada media hora y a ser posible, mirar de lejos, si es a través de una ventana, mejor.

"Nos pasamos de media cuatro horas al día solo delante de la pantalla del móvil y se sabe, además, que las pantallas de última generación irradian hasta cinco veces más luz de alta energía que los anteriores, por lo cual, estos problemas se pueden incrementar", afirma el especialista.

Asimismo, recomienda someter a los niños a una revisión anual de la visión hasta que cumplan los 14 años para detectar de forma precoz la aparición de cualquier trastorno y continuar con estos exámenes una vez cada dos años hasta los 60 o 65 años, cuando deberían volver a ser anuales.

La visión tiene también aliados, entre ellos, una dieta sana. Reducir la ingesta de alimentos grasos y aumentar aquellos productos ricos en nutrientes como las vitaminas A y E, y antioxidantes como el caroteno ayuda a prevenir problemas de la visión como la DMAE, muy asociado también a la exposición al humo del tabaco, según Eiroa. "No se sabe el mecanismo científico, pero los estudios están viendo que las personas fumadoras, al igual que quienes tienen una alimentación basada en la grasa, tienen más propensión a padecer este trastorno", explica.

El ópticos-optometrista también advierte del riesgo de los rayos ultravioletas, para lo que es aconsejable el empleo de gafas de sol homologadas. "Es importante que se tenga garantía de su factor protector porque cualquier gafa de sol va a reducir la intensidad de la luz visible que nos va a llegar, con lo que el mecanismo de protección del ojo, la contracción pupilar disminuye, por lo que si la gafa no protege de la radiación dañina al estar dilatada la pulila va a entrar más luz ultravioleta que si no llevase gafas de sol", advierte.

Eduardo Eiroa | PTE. Ópticos Galicia

"Las pantallas de última generación irradian 5 veces más de luz LED"

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