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Ángel Gil: "La intolerancia a la lactosa hoy es una moda"

El presidente de la Fundación Iberoamericana de Nutrición es conferenciante en la clausura del congreso de nutrición en Santiago

Ángel Gil. // FdV

La leche y sus beneficios, además de sus posibles usos como vehículo de otras substancias que pueden mejorar la alimentación es el tema que el Presidente de la Fundación Iberoamericana de Nutrición expone hoy en el XVII Congreso de la Sociedad Española de Nutrición. Ángel Gil Hernández es catedrático de la Facultad de Farmacia de la Universidad de Granada y miembro de esta sociedad, además está a cargo de la conferencia de clausura de la reunión que se celebra en Santiago esta semana.

-¿Está la leche demonizada en las dietas actuales?

-Están apareciendo unos falsos mitos sobre la leche. Las recomendaciones internacionales basadas en evidencias científicas no demonizan a la leche, si no que promueven su consumo en proporciones apropiadas. Otra cosa es que aparezcan falsas leyendas. Los productos lácteos proveen de una cantidad de nutrientes que muy pocos productos pueden proveer.

-Entonces, ¿es importante el consumo de leche en niños y también en adultos?

-Sí, se recomienda que los adultos tomen dos raciones al día de leche o productos lácteos. A veces no necesariamente hay que tomar leche como tal, se puede optar por alimentos fermentados, queso o yogures. La leche es un alimento básico y los niños y adolescentes deben tomar cuatro raciones diarias porque esto satisface la ingesta de proteínas de alta calidad y de minerales que son fundamentales para el crecimiento y el desarrollo como el calcio, el fósforo, el flúor, el selenio, el yodo... además de una serie de vitaminas como la B1, B2 o B6. Es un alimento globalmente muy completo.

-¿En una dieta equilibrada deben estar presentes la leche y los productos lácteos?

-Sí. Existe solo una forma de nutrirse, que es satisfaciendo las necesidades nutricionales. Pero existen muchas formas de alimentarse y en el ámbito en el que nos movemos, en el de los caucásicos, hace miles de años se produjo una mutación para que pudiésemos tolerar el azúcar de la leche. Así que en nuestro caso es recomendable el consumo de leche y productos lácteos para cubrir los requerimientos nutricionales. Otra cosa distinta es que determinados grupos de población puedan tomar leche con distintas cantidades de grasa, afortunadamente tenemos productos desnatados y semidesnatados.

-¿Por qué cree que proliferan las bebidas vegetales como sustitutivos de la leche?

-No sustituyen a la leche, son otra cosa. Sus proteínas son de un valor biológico mucho más bajo que las de la leche y usualmente tienen añadidas grandes cantidades de sacarosa. La leche contiene lactosa que es otro azúcar que tiene unos aspectos nutricionales muy importantes como es el de mantener una ecología intestinal apropiada, aumentar la absorción de calcio y de otros minerales. Esto no ocurre con esas bebidas vegetales que se pueden consumir por otros motivos, lúdicos o de variación alimentaria, pero nunca como sustitutivos de la leche o los productos lácteos.

-Parece que cada vez hay más intolerantes a la lactosa.

-No existen evidencias científicas de que haya más casos, es verdad que lo que ocurre ahora es que podemos diagnosticar esta intolerancia y por eso aparecen casos pero realmente no hay más que hace cien años. La intolerancia a la lactosa hoy es una moda, intolerantes hoy en España, especialmente en el sur, hay aproximadamente un 20% de la población porque estamos mezclados con orígenes africanos, bereberes, que poseen cierta intolerancia.

-¿En qué aspecto centrará su ponencia sobre la leche?

-Me voy a centrar en un informe que hemos hecho en la Fundación Española de Nutrición y la Fundación Iberoamericana de Nutrición sobre la leche como vehículo para fortificación con otras substancias. Por sus características físico-químicas es una solución acuosa pero también una emulsión y permite que se le puedan añadir vitaminas, minerales o ácidos grasos como el omega 3, que pueden ser de interés para determinados sectores de la población.

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