Comer al menos tres piezas de fruta al día y mantenerse en un peso adecuado son las principales claves para alcanzar una vida larga y sana, según se desprende de los datos de la Encuesta Nacional sobre Estilos de Vida y Longevidad que analiza los hábitos alimenticios de las personas mayores.

La encuesta, elaborada por la Federación Española de Sociedades de Nutrición, Alimentación y Dietética (Fesnad) y la Agencia de Seguridad Alimentaria y Nutrición (Aesan), ha sido presentada hoy con motivo del Día Nacional de la Nutrición, cuyo lema es este año 'Comer bien para envejecer mejor'.

Las principales conclusiones de este estudio, que recoge datos de 242 personas de entre 80 y 104 años, revelan que mantener una dieta frugal y una actividad física diaria contribuye a una mayor longevidad y, además, repercute en una mejor calidad de vida en la tercera edad.

El vocal representante de la Sociedad Española de Nutrición Comunitaria en la Fesnad, Joan Quiles, ha explicado los datos de la encuesta, según la cual, aquellas personas que al final de su vida manifiestan tener un buen estado de salud coinciden en haber mantenido un peso adecuado a lo largo de su vida y haber comido tres o más piezas de fruta al día.

"El secreto de la longevidad que se puede extraer de las respuestas de las personas mayores está en mantener una dieta mediterránea", ha afirmado Quiles, quien ha advertido, no obstante, de que los jóvenes se están alejando de estos hábitos saludables.

Así, algunos de los patrones que recomienda consisten en consumir 5 raciones al día de fruta y verdura, entre 2 y 3 platos semanales de legumbres, 3 raciones semanales de pescado, otras 3 de frutos secos, beber al menos 1 litro de agua al día y sustituir los lácteos enteros por desnatados o semidesnatados.

En resumen, comer de forma frugal y llevar una vida activa -lo que implica dedicar media hora diaria a una actividad física que puede consistir en caminar-, ha explicado Quiles.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) prevé que en 2050 un 30,8 por ciento de la población española "sea mayor", de manera que España se convertirá en el segundo país más envejecido del mundo por detrás de Japón.

"Estos datos están muy bien, pero lo que queremos no es solo vivir más años, sino vivir mejor y para lograrlo, hay que cuidar los estilos de vida", ha subrayado el presidente de la Fesnad, Jordi Salas-Salvadó.

En la actualidad -ha explicado- las principales causas de muerte son las enfermedades cardiovasculares, el cáncer, la diabetes y otras enfermedades crónicas. "La genética no la podemos cambiar, pero el ambiente en el que se desarrolla nuestra vida y los hábitos sí se pueden modificar", ha señalado.

Sin embargo, los datos de España no son muy optimistas en este sentido.

Según ha indicado la representante de la AESAN Teresa Robledo, más del 55 por ciento de la población adulta española tiene exceso de peso, el 42 por ciento se declara sedentario y la prevalencia de la obesidad y sobrepeso entre los niños alcanza ya el 49 por ciento.

"Una alimentación poco saludable y el sedentarismo han contribuido decisivamente al sobrepeso y alertan de los riesgos para la salud que tendrá en el futuro la población adulta", ha advertido.

Por ello, Robledo ha insistido en que es necesario interiorizar unos hábitos de vida y una dieta saludable "desde edades muy tempranas" para poder disfrutar de una madurez saludable.