La seducción puede adoptar muchas formas y caminos y, por lo menos en el imaginario colectivo, la lencería y los zapatos de tacón son dos elementos asociados a la sensualidad femenina. En muchos casos, tienen incluso connotaciones fetichistas.

El porqué una mujer parece más sexy si lleva calzado con tacones altos tiene relación con la postura que adopta al caminar y que obliga a mantener la espalda más recta; las piernas dan la sensación de ser más largas, y los glúteos parecen elevarse. Hay quien asegura que el hecho de aumentar la altura contribuye a sentir un cierto poder sobre los demás. También tiene un lado negativo, y es que caminar con tacones requiere un cierto entrenamiento; la sensualidad y la elegancia se pierden cuando el paso es inseguro, al margen de que puede provocar daños irreparables en los pies y espalda si se abusa de ellos o se usan tacones excesivamente altos.

Algo parecido ocurre con la ropa interior. No hay que olvidar que los sostenes y bragas son ante todo funcionales, pero se puede conjugar su uso con un diseño atractivo que haga sentirse sensual, más que explícitamente sexual, a la mujer. Las transparencias, que insinúan sin mostrar del todo, son lo que se considera más sexy, como los ligueros con medias, aunque resulten poco prácticos para las usuarias. Los diseñadores de lencería consiguen que incluso una prenda que haga las funciones de faja pueda resultar atractiva.

Negligé de gasa, combinado estampado de leopardo. Andrés Sardá

Corsé con liguero de encaje. Agent Provocateur

Corpiño largo elástico de tipo faja. Intimissimi

Conjunto de tul bordado con coulotte. Andrés Sardá

Sostén y braguita tanga de encaje. Oysho

Dos piezas de microfibracon puntilla. Promise

Conjunto en contraste de color. Etam

Con doble tira en el talón y de piel grabada. Dior

Con lazo, de ante con plataforma. Pura López

Salón de corte clásico metalizado. Guess

Merceditas de charol con detalles dorados. Nine WestNine West

Sandalia atada al tobillo. Louis Vuitton

Zapato estampado con grabado de serpiente. Stuart Weitzman