Moncho Borrajo se caracteriza por su ingenio y por no tener pelos en la lengua. El cómico ourensano ha arremetido contra el alcalde de Santiago, Martiño Noriega, en una carta abierta en su perfil de Facebook, por el polémico pregón del carnaval compostelano, que incluyó ofensas al apóstol y a la Virgen. "Me dicen que usted contrató a un presunto 'actor' para hacer un pregón del carnaval en una ciudad que vive económicamente de una religión la católica y presuntamente fue usted elegido democráticamente para el cargo que desempeña", dice Borrajo en el inicio del texto.

"Usted y el 'actor secundario' [señala Borrajo en referencia a Carlos Santiago] me han ofendido al insultar a personas a las que yo quiero y respeto y esto no es presuntamente, es una realidad. A una la tengo como madre espiritual y al otro como compañero de un amigo mío llamado Jesús, al que usted conoce pero no respeta".

El humorista gallego sugiere que la supuesta intención satírica del pregón no se hubiese dirigido a otras creencias religiosas: "Toda su valentía se quedaría en agua de Borrajas, perdone el toque humorístico personal, si el pregón fuera dedicado a Mahoma el profeta o a Alá el Grande -escribe Borrajo-, porque entonces no sería presuntamente, que sus testículos volaran hacia el cielo de Santiago de forma sonora. El carnaval es libertad, no insulto, es diversión no manipulación, es valentía no cobardía política".

El humorista, que ya le escribió otra carta a Pablo Iglesias, le advierte al alcalde de las Mareas y al actor: "Se han metido con mis amigos María, Pilar y Santiago", y concluye con una post data dirigida a Podemos y a sus confluencias: "Pueden seguir vetando mis actuaciones en los ayuntamientos en los que desgobiernan, pero no se preocupe, a mis 68 años no necesito de su caridad política".