Si escuchas su risa, estás muerto. El Joker es uno de los villanos más icónicos y más queridos del universo del cómic. Un personaje con un aspecto único cuya maldad varía en función del guionista de turno. El príncipe payaso puede ser desde un bufón inofensivo como el que interpretó César Romero en la serie de Batman de 1966, hasta un violento psicópata impredecible como en "La broma asesina" del aclamado Alan Moore.

El gran público lo ha conocido en el cine, donde interpretarlo supone un auténtico reto para los actores, especialmente desde la sublime actuación de Heath Ledger en "El caballero oscuro" de Christopher Nolan. Hollywood sigue teniendo planes para este maniaco con dos proyectos independientes que cuentan con grandes nombres tras ellos. Por un lado, DC quiere producir una película de Harley Quinn (cuyo estreno está previsto para 2019), con Margot Robbie como la protagonista y Jared Leto como el Joker. Ambos actores ya encarnaron estos roles en la malograda "Escuadrón Suicida", donde el oscarizado intérprete no estuvo a la altura. La sombra de Ledger es muy alargada y Leto, observado por todos los fans, trató de crear a su propio villano, pero se quedó en una espantosa sobreactuación.

El otro filme protagonizado por el enemigo de Batman será una precuela sobre sus orígenes que producirá el mismísimo Martin Scorsese. De momento, lo poco que se sabe es que estará ambientada en el Gotham de los 80 y que Todd Phillips, guionista de la trilogía "Resacón en Las Vegas" y Scott Silver, responsable del libreto de "8 Millas", se encargarán de escribir esta historia.

Lo interesante de esta nueva cinta es que intentará arrojar luz sobre unos inicios que realmente nunca han estado claros. En "El hombre tras la Capucha Roja", de Bill Finger , el Joker era un afamado criminal que vestía una capucha y una capa roja. Después de caer en una fosa llena de productos químicos, se convertía en el personaje tal y como lo conocemos. Christopher Nolan, en cambio, ahondaba brillantemente en la locura del villano contando diferentes historias truculentas para desentrañar su pasado, pero, muy en su línea, no aclaraba cuál era la verdadera. Sin embargo, quizás la mejor explicación sea el de "Batman: La broma asesina". En ese relato, el Joker es un ingeniero corriente que decide dejar su trabajo para ser humorista, empresa en la que fracasa. Desesperado por solventar los problemas económicos y con una esposa embarazada, decide colaborar con unos criminales en un atraco. Antes del golpe, se entera de que su mujer ha fallecido en trágicas circunstancias. Para más inri, el atraco sale mal y el Joker cae en una piscina con productos químicos. Su nueva apariencia permanente, junto con los trágicos sucesos que ha vivido, propicia que este ingeniero que solo quería ayudar a su familia se hunda en la locura. Ojalá Scorsese nos regale esta historia.