Leonor se hace mayor y no nos enteramos. La Princesa de Asturias cumple hoy 11 años y, de momento, no hay señales de que los españoles vayan a gozar de una foto que certifique el aniversario de la Heredera al Trono al estilo de otras casas reales europeas, que no dudan en lucir y presumir de sus retoños.

Para bien o para mal (el tiempo dirá...), sus padres -especialmente su madre, la Reina Letizia- han optado por blindar su infancia hasta tal punto de que la única aparición pública en un acto oficial de la Princesa es anual: en la Fiesta Nacional y desde hace un par de años.

Así sucedió el pasado 12 de octubre, cuando la pequeña apareció junto a su hermana la Infanta Sofía. Ambas vestidas igual, una de rojo y la otra de azul, y exhibiendo comportamientos similares: expectantes, sonrientes, educadas, atentas y ávidas observadoras de todo lo que les rodeaba.

Porque cuentan que si la Reina tiene alergia a la exposición pública de su primogénita, ésta no para mostrar síntomas de que le va la marcha, es decir, de que le gusta el papel que intuye está llamada a desempeñar algún día. La prueba es que ha preguntado a sus padres que cuándo dará su primer discurso. No se sabe lo que le han respondido los Reyes, aunque por aproximarse un poco a lo que se cuece dentro de la Casa Real se podría pensar que le quedan poco menos de dos años.

Los que distan para que cumpla 13, los que tenía Felipe VI cuando se estrenó en los entonces premios "Príncipe de Asturias", donde ofreció su primer discurso "sin ningún titubeo", tal y como recogió entonces en su crónica el periodista Juan Cruz para El País.

El pequeño Felipe se dirigía por primera vez al público un 3 de octubre de 1981 en la capital del Principado. que le daba el título, igual que ahora se lo da a su primogénita, quien oficialmente aún no la ha visitado. A su edad, el padre llevaba ya bastante delantera a la hija. Pues con tan solo 9 años había acudido ya a Covadonga, el 1 de noviembre de 1977, para recibir simbólicamente los atributos que le hacían merecedor del título de Príncipe de Asturias.

Éste es uno de los deberes pendientes de Leonor, quien de momento parece que se tendrá que conformar con ser la princesa -en minúsculas- de su casa, un título que ha de compartir con su hermana Sofía.

Ambas estudian en el mismo colegio, el Santa María de los Rosales, donde la norma es proteger de miradas indiscretas a la heredera, algo que han de cumplir a rajatabla profesores y padres.

Hoy celebrará su cumpleaños rodeada de amigos. Todo muy normal, menos en una cosa: nada de fotos con móviles. Orden de la Reina.