Penélope Cruz aparece en la portada de la revista "Fotogramas" caracterizada como Audrey Hepburn, una de las actrices a las que la revista de cine más longeva del mundo ha dedicado su portada en estas siete décadas.

El vínculo con la revista, según explica Cruz en la entrevista, "viene de muy atrás en el tiempo", cuando era una chica de Alcobendas "muy lejos" aún de Pedro Almodóvar y el "Oscar", pero de la que la publicación seguía cada paso.

Por eso ha querido que Cruz fuera el icono de su aniversario y para ello ha recreado, "en una exclusiva y muy ambiciosa producción fotográfica", algunas portadas emblemáticas de la mítica revista, como las que también protagonizaron Sofia Loren y Julie Christie.

El "making of" de la producción, realizada por el fotógrafo Nico, está colgado en la web de la revista.

Para la portada han optado por una recreación de la fotografía de Audrey Hepburn como la Holly Golightly de "Desayuno en Tiffany". "Me daba un poquito de pudor porque es uno de mis grandes ídolos desde la infancia. En ningún momento aspiro a parecerme a ella, pero gracias al talento de todo el equipo se ha creado algo que hace pensar en la portada de 1961. Voy vestida exactamente igual, peinada exactamente igual...", comenta la actriz en el reportaje.

Cruz, que estrena "La Reina de España", su reencuentro con Fernando Trueba 18 años después de "La niña de tus ojos", habla "con franqueza" de su pasado, presente y futuro.

Y en "La Reina de España" encarna a la gran estrella española del cine Macarena Granada, que regresa a su tierra tras haber triunfado en Hollywood para dar vida a Isabel la Católica, en una de las superproducciones que vinieron a filmar los americanos a partir de 1956.

"He intentado hacer ficción con la intimidad de un rodaje", dijo Trueba -que intenta que sus rodajes sean "como una tertulia de amigos"-, sobre esta cinta, en la que, asegura, "no hay nostalgia" porque él no la tiene "ni del franquismo ni de su infancia". El madrileño es también el autor de los diálogos de esta película, a los que ha aportado "color", "localismo" y "temporalidad" introduciendo frases y palabras -muchas de ellas ya en desuso- que oía en su niñez en el barrio de Estrecho, así como otras recogidas en la novela de 1955 "El Jarama".

Comentando "La Reina de España", Fernando Trueba recordó en un coloquio cuando Rafael Azcona decía que el Premio Nobel de Literatura debía recaer en Woody Allen: "Por supuesto que se lo merece. Se lo daría a él y a otros muchos, el cine es un género literario", dijo tras la controversia con Dylan.