El presidente del Comité Olímpico Español, Alejandro Blanco, recibió el martes 27 de septiembre a los deportistas olímpicos y paralímpicos, pertenecientes al proyecto UCAM-COE, que destacaron en los Juegos de Río 2016. Entre ellos Cristian Toro, que no solamente triunfa en su profesión, también tiene éxito en el amor al lado de su novia Irene Junquera, que debido a su apretada agenda no pudo asistir al evento.

Tras el homenaje el piragüista nos habló del feliz momento que está viviendo no solo en el ámbito profesional sino también en el personal.

Lo primero darte la enhorabuena por los Juegos Olímpicos.

Bueno estoy muy bien, muy feliz, muy contento y viendo toda la repercusión que ha tenido me siento muy feliz y satisfecho porque veo que la gente valora el trabajo que hacemos porque competimos en los Juegos Olímpicos y son unos días pero detrás hay mucho trabajo y mucho esfuerzo, muchas horas de sacrificio y se recompensan con la medalla y ahora con este reconocimiento en nuestro país. Es un orgullo para todos nosotros ver que tanta gente disfruta de eso.

¿Cómo ha sido la vuelta?

Muy caótica la verdad, he estado un poco descolocado, no sabía muy bien como asimilar todo de golpe, mucha de la gente que quería estar conmigo en ese momento y ahora ya un poco más tranquilo, empiezo a asimilarlo un poco más.

Lo bueno es que tu familia y tu chica te acompañan.

Sí, allí la verdad es que tuve la suerte de tenerlas a ellas y poder disfrutar allí con ellas y me sació eso un poco porque la verdad es que cuando te bajas del pódium lo que quieres es compartirlo y tenerlas allí fue una fortuna.

¿Qué proyectos hay ahora?

Entrenar porque como decía me da la sensación de que el rival está entrenando y me está acortando terreno. Tengo ganas de empezar a entrenar, asentarme, coger tierra y empezar a prepararme porque lo que se ve es el resultado de los cuatro años.

Hay mucha gente que te conoce por tu participación en el programa de Mujeres y Hombres. ¿No te arrepientes?

No, no me arrepiento porque creo que no he hecho nada malo, me lo pasé muy bien, fue un verano, era más joven y como demuestro ahora yo nunca abandoné el deporte, nunca abandoné los estudios y bueno, hay muchas maneras de mirarlo y yo lo enfoco bien y me divertí bastante.

El tronista olímpico.

Sí, bueno pero creo que no es nada malo. No depende del sitio en el que estés si no de quién seas y yo estoy muy orgulloso de quién soy y me siento muy bien.

¿Cómo se compatibiliza una relación con los entrenamientos?

Por suerte mi chica me apoya muchísimo, ella casi siempre se desplaza los fines de semana para verme, intenta estar conmigo siempre porque por el régimen de concentración que yo sigo no me puedo mover y es ella la que viene a verme y bueno eso se nota muchísimo. Me apoya mucho.

¿Un paso más en la relación, una boda o un niño?

Tengo que ir poco a poco, tengo que seguir trabajando y quiero hacer las cosas bien, tener pies de plomos.

¿No lo descartas para un futuro?

No, no lo descarto, yo soy muy familiar, me gustan mucho esas cosas pero estoy en pleno apogeo deportivo y tengo que aprovecharlo.

¿Qué ha aportado Irene a tu vida?

Muchísima estabilidad y me ha ayudado muchísimo a trabajar en el día a día porque al pódium te subes solo pero hay muchísima gente detrás que ha influenciado para que tu estés ahí, en este caso Irene y eso solo lo sabe el deportista, sabe la gente que ha estado con él en el día a día e Irene es una de esas personas.