El cantante británico Paul McCartney pasó por una depresión tras la ruptura de los "Beatles" e incluso consideró dejar la música definitivamente, según ha explicado en un programa de radio de la BBC. También contó que empezó a beber mucho al sentir la pérdida, después de que la banda de Liverpool decidiera disolverse en 1970.

"Fue difícil saber qué hacer después de los 'Beatles'. ¿Qué es lo que sigue? Estaba deprimido. Lo estarías. Estabas rompiendo con los amigos de tu vida, así que le di a la botella", aseveró el artista británico.

"El negocio nos separó", reconoció McCartney, que dice que la separación le provocó una depresión, ya que no sabía "si iba a continuar en la música", por lo que se marchó a Escocia un tiempo y empezó a beber.

Según explicó, fue su mujer de entonces, Linda, la que le empujó a salir de la situación al formar con ella el grupo musical "Wings". "No fue un buen grupo. La gente decía que Linda no podía tocar el teclado, y era verdad", dijo. McCartney también expresó su tranquilidad por haber mejorado su relación con John Lennon antes de que este fuese asesinado as tiros en Nueva York en diciembre de 1980.

"Fue realmente grandioso que estuviéramos otra vez juntos antes de su muerte porque hubiera sido (algo) muy difícil de llevar", contó el músico del inmortal cuarteto británico.