La entrega de unos premios como los Globos de Oro no sería igual sin cierta dosis de controversia, en torno a las nominaciones. La ausencia de Johnny Depp en la categoría de Mejor Actor-Drama, por su impactante transformación en un mafioso irlandés para Black Mass, ha sido de las más polémicas.

Otra inesperada omisión ha sido la de Carey Mulligan, protagonista de Sufragistas, para Mejor Actriz-Drama. Aparte, y teniendo en cuenta sus otras nominaciones, resulta chocante la completa exclusión entre los nominados de todo el reparto de Spotlight, especialmente de Mark Ruffalo y Michael Keaton.

En cambio, la ausencia en las nominaciones de El despertar de la fuerza, el exitoso resurgir de la saga Star Wars, tiene una explicación más rocambolesca: el secretismo previo al estreno de la séptima entrega impidió a los críticos ver el filme dentro del plazo. La galaxia tendrá que esperar.