La cuenta atrás para la llegada de los Reyes Magos ha comenzado. Y uno de los regalos más habituales en estas fechas es la ropa. Los Magos de Oriente saben que preparar el armario para el nuevo año es una idea muy buena, por eso siempre buscan alguna prenda especial para los más pequeños de la casa. Pero, además, para todos los que no han escrito todavía su carta de deseos y quieren incluir algún modelito nuevo en ella aquí van algunas de las prendas imprescindibles para preparar a los niños para 2016.
El fin del otoño y el principio del invierno han sido de los más calurosos que se recuerdan. Altas temperaturas, pocas lluvias y pocas ganas de abrigos y botas. Por eso, las tendencias para este invierno están de plena actualidad para los próximos meses. Los abrigos de borreguillo, en color natural o teñido en grises, marrones, azules o tonos pastel son una de las prendas todo terreno para ellas; las bomber, la prenda imprescindible para ellos. Las gabardinas o trench, en el clásico beige de inspector o con estampados de cuadros, son la mejor alternativa para la lluvia. Los plumíferos cortos y de colores intensos, una buena forma de sobrellevar mejor el frío, y las cazadoras de cuero, una buena opción para los días que anuncien la llegada de la primavera. Y es que muchas firmas de moda infantil siguen proponiendo las cazadoras tipo perfecto para la previa de la temporada estival y para las noches frescas de verano.
Los looks de aire británico y francés protagonizan las campañas de invierno. Prendas llenas de cuadros en azul y rojo de estilo colegial, pantalones con tirantes, vestidos de tartán, americanas en azul marino y gris, boinas y gorros de ala. Los vestidos de punto, los jerséis de lana, los leggings de cuero y las botas estilo Panama Jack son opciones interesantes para tener el armario preparado hasta el verano.
El vestuario infantil para la primavera y el verano de 2016 se cubre de colores pastel. El rosa cuarzo y el verde mint tiñen vestidos vaporosos, camisetas y pantalones cortos, sudaderas con mensajes alegres y estampados florales y frutales. El aire rockero que llegó hace varias temporadas parece que ha venido para quedarse. Las niñas ya no quieren ser princesas el próximo verano. Se visten con faldas de tul y vestidos de plumeti, pero los combinan con botas y botines de aire country, cazadoras de cuero y jerséis y camisetas oversize. Los lunares, las estrellas, las rayas multicolor, las referencias marinas y el tejido vaquero siguen apareciendo en los vestidos cortos sin mangas, en los pantalones por encima de la rodilla, en las camisas de manga corta, en las cazadoras y en los conjuntos más desenfadados y playeros.
Las faldas se acortan y los pantalones bajan hasta el tobillo para ellas; las bermudas se llenan de colores y las camisetas de estampados para ellos. Para ir a la playa, los estampados mandan. Las pasarelas infantiles y las casas más importantes proponen prendas de baño con estampados de frutas, flores y animales. Los bañadores y bikinis de cuadros vichy en colores pastel apuntan a convertirse en un objeto de deseo para las más presumidas. Los bañadores algo más flojitos y en tonos azules serán los más deseados por todos los que se quieran ver guapos.
Las gafas de sol, las sandalias, los capazos, las gorras... todos los complementos están perfectamente pensados para que combinen entre sí. Y si en invierno los gorros de lana y los sombreros de ala son protagonistas, en el verano de 2016 seguirán mandando los gorros de paja, las coronas de flores y los lazos de estampados divertidos que sirven para atar coletas despeinadas y moños tipo bailarina.
Con todas estas ideas ya no hay excusa para enfrentarse a 2016 "hecho un pincel".
