Distinguido con el Premio Nacional de Cine en 1995 y dos veces ganador de un Goya, el actor leonés Carmelo Gómez se mantiene firme en su decisión de dejar el cine, porque cree que es un trabajo cada vez más "precario" que en España "va a estar perseguido siempre". "No es el único caso el mío, hay un montón de actores que han desaparecido pero no lo han dicho", afirma Gómez en una entrevista con Efe con motivo del estreno de "La playa de los ahogados", un thriller "muy gallego" dirigido por Gerardo Herrero, que llegará a las pantallas el 9 de octubre. Será su penúltima aparición cinematográfica, a la espera de que se estrene "La punta del iceberg", otra cinta de suspense dirigida por David Cánovas, donde compartirá protagonismo con Maribel Verdú y Álex García, entre otros.

"Es una decisión firme", subraya el que fue rostro imprescindible del cine español de los 90, con títulos como "Días contados", de Imanol Uribe; "El perro del hortelano", de Pilar Miró, y la trilogía de Julio Medem formada por "Vacas", "La ardilla roja" y "Tierra".

En "La playa de los ahogados", adaptación cinematográfica de la novela de Domingo Villar, Gómez interpreta al inspector Caldas, un policía "muy humano" y alejado de los estereotipos de detectives atormentados, borrachos o asociales, tan frecuentes en el género. "Es policía pero no lo parece, ni él mismo se lo cree mucho aunque luego a la hora de la verdad ejerce con mano de hierro. Pero es un tipo muy humano, que se acerca a la gente, y que ama a los suyos", explica. El contrapunto lo pone el actor y presentador de televisión Antonio Garrido, que interpreta a su compañero de fatigas, un detective más "violento" e "impulsivo".