"Reconozco esa deuda y mi intención es saldarla como pueda y con el tiempo", aseguró ayer Henar Ortiz, tía de la Reina Letizia en el juicio celebrado contra ella, su madre, Menchu Álvarez del del Valle, abuela de la monarca, y Jesús Ortiz, padre de la soberana, por un presunto delito de insolvencia punible por alzamiento de bienes. "Han cogido el rábano por las hojas, yo creo que les interesaba mucho esto", indicó por su parte, al final del juicio el padre de la Reina, en referencia al hecho de sentar en el banquillo a los familiares de Doña Letizia.

La deuda a la que hizo referencia Henar Ortiz es una de 22.600 euros contraída por una de sus empresas, Henarmonía SC, con la artesana Sandra María Ruiz Vázquez, que había elaborado una colección de joyería para la marca de la tía de la Reina. Han pasado ocho años y la deuda, con los intereses, supera los 30.000 euros, pero Henar Ortiz ha consignado ya 15.000.

La artesana, cuyos intereses defiende su hermano, el abogado Miguel Ruiz Vázquez, sostiene que Henar Ortiz y su hermano Jesús adjudicaron a su madre la parte que les correspondía, tras la muerte de su padre, de la casa familiar de Sardéu (Ribadesella), para evitar que la vivienda fuese embargada, lo que constituiría un delito de alzamiento de bienes, por el que pidió dos años y medio de cárcel para cada uno de los tres acusados.

Debe 130.000 euros al Banif

Tanto las defensas, a cargo de Javier Mario de la Riera y Fernando Garrido, como el teniente fiscal de Asturias, Joaquín de la Riva, que en este caso no acusa, negaron que la intención de los parientes de la Reina fuese eludir el pago a la joyera, sino obtener el líquido suficiente para saldar una deuda de unos 130.000 euros que otra de las sociedades de Henar Ortiz con el Banif.

Henar Ortiz reconoció que su familia la había sostenido económicamente. "Me ayudaron mucho cuando mi hija era pequeña", admitió. Cuando se le vino encima el pago del crédito con Banif, fue también su madre la que salió al rescate. "Su intención era hipotecar la casa para pagarme a mí", añadió. De la otra deuda, la que tenía con Sandra María Ruiz, no dijo nada a sus familiares. "Intentaba arreglarlo por mí misma y no deseaba disgustarles más", aseguró. "Unos amigos reunieron dinero en su día, le ofrecía a Sandra la licencia de marca en precario y la colección incompleta. No entendí por qué no aceptó. Durante este tiempo consigné 15.000 euros. Desde que cerré la tienda, tengo cero euros. Yo sólo quiero pagar", aseguró.

"Sabía que tenía problemas, pero la administración la llevaba ella. Me decía: 'Tranquilo que lo intento controlar'. A mí me entró el nerviosismo cuando llegó un burofax del Banif, recordándome que era avalista de un préstamo a mi hermano", indicó Jesús Ortiz. El padre de la Reina aseguró que su hermana no le detalló las deudas que tenía. Solo tuvo conocimiento de la del Banif y de una de 5.000 euros, también de la artesana de joyería, que pagó poco antes de que ésta les demandase por otros 22.600 euros.

Las defensas de los acusados estimaron poco creíble que los acusados planeasen "una operación tan compleja y costosísima" para eludir el pago de una deuda de 22.600 euros, cuando además el embargo del cuarto de vivienda de Sardéu que le correspondía a Henar Ortiz era imposible. "Se ha buscado solamente sentar a la familia Ortiz en el banquillo, es una injusticia con ellos", sentenció el letrado Fernando Garrido Polonio.

El fiscal De la Riva abundó en la misma idea. "Esto es un impago de una deuda, como tantos y tantos que existen", y estimó inverosímil que hubiesen planeado un alzamiento. "Dice la acusación particular que podrían haber vendido de la casa. Yo no dejo en la calle a mi madre de 80 y pico años. La solución para eso es hipoteca inversa. Es lógico que se preocupasen de la deuda más grande", indicó. Y finalizó: "Terminarán pagando, aunque extraña mucho que no lo hayan hecho ya, siendo la deuda tan pequeña".