El director comercial y de desarrollo de Cofely España, Constantino Álvarez de la Cueva confirmó anoche que ya han sido entregados los proyectos de ampliación del Hospital do Salnés y de los quince nuevos centros de salud a la Consellería de Sanidade. El contrato fue suscrito finalmente el 6 de agosto en la Dirección Xeral de Recursos Económicos de la Xunta de Galicia, aunque la adjudicación se registró el 13 de junio.
Las fechas conocidas ayer justifican la tardanza en la elaboración de los proyectos y que la firma adjudicataria no pudiera hacer entrega de todos los proyectos hasta ayer. "Desde hace dos meses se han ido entregando los proyectos en fechas sucesivas", asegura el responsable de la empresa.
A partir de ahora comienza el proceso de valoración por parte de los técnicos de la Xunta de los distintos proyectos presentados, por si fuera necesario realizar alguna revisión de alguno de ellos o de su conjunto. Una vez que se le dé el visto bueno, deberá darse traslado al Consello de la Xunta para su aprobación y luego iniciar el proceso de licitación de la obra, lo que conllevará su posterior adjudicación.
La empresa Cofely elaboró también los proyectos de nuevos centros de salud a A Capela, Ares, Arteixo, Cambre, Culleredo, Malpica, Santiago, Barbadás, Pontevedra, Ourense ciudad, Gondomar, Marín, Nigrán, Oia y Tui.
Respecto al Hospital de O Salnés, el proyecto establece la construcción de un nuevo edificio en una superficie de actuación de 4.157 metros cuadrados, lo que supone la creación de un hospital de día, mejoras en las áreas de Urgencias y de Reanimación así como en el bloque quirúrgico y obstétrico. La idea de la Xunta radica en que la obra se licite en el primer semestre del presente año, lo que permitiría que los trabajos pudieran iniciarse en julio, pues la duración prevista, que se realizan en tres fases, es de 18 meses.
Queda así tiempo suficiente para que la obra pueda estar concluida antes de finales de 2015, una exigencia de la Unión Europea. Cabe recordar que se trata de una inversión finalista de 8,2 millones de euros.
El Feder (Fondo Europeo de Desarrollo Regional) aportaría el 80 por ciento de la inversión, mientras que a la Xunta solo corresponde el 20% restante, algo más de 1,5 millones.
