Según este organismo, el nuevo acuerdo de la Comisión Europea obligaría a los países de la UER a evaluar el impacto comercial de cualquier nuevo servicio que las televisiones públicas tuvieran previsto desarrollar. De esta manera, se estaría "limitando severamente la adaptación de estos canales estatales respecto a los desarrollos tecnológicos y a la búsqueda de un mejor servicio público".

"La UER apoya con firmeza a los países miembros en su rechazo a aceptar las medidas comunitarias, las cuales pretenden conducir indirectamente a una armonización de la regulación de los servicios públicos de televisión", señaló.

Asimismo, este organismo recordó que el Tribunal Europeo de Primera Instancia "dejó claro" el pasado 22 de octubre que la definición de estos canales estatales "no dependía de la línea de programación seguida por las televisiones privadas".

Entre las principales novedades anunciadas ayer por el Ejecutivo comunitario contempladas en la revisión se incluyen la autorización a las cadenas públicas de ofrecer contenidos de pago, aunque no se especifica si este servicio recibirá financiación estatal.

La UER, fundada en 1950, está formada por 75 canales europeos --entre ellos, RTVE-- y alcanza de manera global una audiencia de 650 millones de espectadores semanalmente. Este organismo es el responsable de la organización del Festival de Eurovisión o el Eurodance, entre otros evento