Asombrada con el mundo Twitter... Con su rapidez, frescura, flujo de información, implicación, seguimiento. ¿Cómo he podido tardar tanto?". Este es uno de los primeros "tuits" (o "tweets") de una gallega que acaba de unirse esta misma semana a Twitter, la red social que ha cumplido cinco años. Aunque muchos dudan de su utilidad, cuando entran se enganchan y no paran de "trinar", "gorjear" o "parlotear", que es lo que significa el término en inglés que da nombre a esta red de "microbitácoras". 140 caracteres dan para mucho.

"Es muy adictivo, ese es el peligro", advierte, con retranca, Manuel Bragado, uno de los "tuiteros" vigueses más activos. Lleva tres años "tuiteando", y como otros internautas, al principio no le acababa de convencer para qué servía. "Ahora me sigue cada vez más gente -comenta Bragado, que utiliza casi siempre el gallego en la vida real y en la virtual-. Su extensión ha estado condicionada por los smartphones, el iPhone y el internet telefónico".

Bragado tiene razón: un 40 por ciento de los usuarios de Twitter participa en esta red a través de su móvil (frente al 32% de Facebook y Tuenti). Y la fiebre del iPad no ha hecho más que extender el fenómeno.

No existen datos oficiales sobre la implantación de Twitter en Galicia, aunque es un fenómeno todavía más minoritario que Facebook. Marcus Fernandez, subdirector y webmaster del portal tecnológico gallego Código Cero, explica que predomina el uso de Twitter por parte de usuarios frikis o más conectados que la media, en parte por el carácter efímero de los mensajes, que hacen que el internauta pierda el hilo si no está muy atento. Además, el uso de abreviaturas como RT ("retweet", redifundir un "tuit") o TT ("trending topic", tema predominante), pueden despistar a los no iniciados.

¿Para qué sirve realmente Twitter? Su principal defecto, su utilidad difusa, es también su mayor virtud. Cada uno lo usa para lo que quiere: chatear, compartir enlaces, expresar su estado de ánimo, promocionarse... "Es una herramienta paradójica: nunca fue tan sencillo hacer algo tan complicado, ni tan complicado hacer algo tan sencillo". La frase es de José Luis Orihuela, profesor de la Universidad de Navarra, influyente gurú de internet y autor del libro "Mundo Twitter" (Alienta), de próxima publicación.

Convencido de que "Twitter no se comprende a la primera", Orihuela define esta red social como una herramienta con la que cada usuario decide a quienes escuchar, y con lo que dice delimita el círculo de los que van a escucharlo. "En Twitter las palabras valen mil imágenes. Es el alambique en el que se destila la cultura de nuestro tiempo -sentencia este experto-. Algo tiene Twitter cuando los que están fuera no saben cómo entrar y los que están dentro no saben cómo salir".

Lady Gaga y Barack Obama son dos ejemplos opuestos de lo que significa Twitter. Según Twittercounter.com, la cantante es la persona más seguida en Twitter del planeta, con casi nueve millones de seguidores ("followers"), mientras que el presidente de los Estados Unidos ocupa el cuarto puesto, con poco más de siete millones, por debajo de otras celebridades del pop como Justin Bieber y Britney Spears. Lo más superficial se da la mano con lo más culto y relevante.

En Galicia tenemos a otro músico pop, Iván Ferreiro, asiduo tuitero, con casi 20.000 seguidores. Mediante esta red social, el cantante vigués suele chatear con sus amigos músicos en Twitter sobre el reality "Princesas de barrio". A raíz de estos chascarrillos montó el supergrupo La Orquesta Poligonera con colegas -en el doble sentido de la palabra- como su hermano Amaro, Coque Malla, Lori Meyers y Nicolás Pastoriza.

Si en el planeta futbolístico son masivamente seguidos cracks como Cristiano Ronaldo, Piqué y Cesc, no hay constancia de ningún jugador del Celta en Twitter. Sí tienen perfil otros futbolistas vinculados a Vigo, como los hijos de Mazinho, Thiago y Rafinha Alcántara (FC Barcelona), Iago Falque (Villarreal B) y el exjugador céltico Gustavo López.

Al igual que el Cuervo López, el exciclista mosense Óscar Pereiro utiliza Twitter para mantener el contacto con sus seguidores después de su retirada, dándole prioridad a los temas profesionales. "Es un complemento para mi marca -señala Pereiro-, y un filtro para los periodistas que me siguen. Lo veo positivo, pero no estoy enganchado. Escribo en los tiempos muertos, en los aeropuertos o en casa".

La imagen de marca es fundamental para un deportista y más para una empresa. Según un estudio de MuyPimes, el 20 por ciento de las pequeñas y medianas empresas consideran las redes sociales como vitales para su negocio. Facebook es la red social más popular, mientras que Twitter solo es utilizado por el 9% de las mismas. Los empresarios consideran que Twitter es una de las redes con mayor futuro. Del 32 por ciento de los negocios que tienen presencia en Facebook, un 24 por ciento tiene además un canal propio en la red de microblogging.

No cabe duda de que vender y venderse es una de las utilidades de Twitter, y eso lo saben muy bien los políticos, más aún en la actual precampaña. En el caso de Vigo, Corina Porro ha sido la "tuitera" más conspicua y la que mayor número de "tuits" ha emitido, seguida de Santiago Domínguez Olveira y de Abel Cabellero, el último en incorporarse a Twitter. Muchas veces, como admite Domínguez Olveira en su perfil, es el equipo de colaboradores del político el que mantiene activa la cuenta.

Aunque tal vez el gremio que con mayor entusiasmo ha abrazado Twitter ha sido el de los periodistas. Noticias de impacto como las revoluciones árabes -algunas, convocadas precisamente por Twitter- y el tsunami de Japón se han contado minuto a minuto en esta red social, paraíso de las breaking news.

El periodista y bloguero gallego Henrique Mariño destaca también la utilidad de Twitter para sacar a la luz firmas que hasta ahora solo eran conocidas en el reducido ámbito de sus medios locales, como Manuel Jabois y Xurxo Chapela. Estos nuevos emisores se unen a otros nombres destacados del "blogomillo" o "blogosfera" gallega, como Antón Losada, María Yáñez, Xosé Manuel Pereiro , Francisco Castro y Santiago Jaureguízar.

¿Demasiada información? ¿Demasiado superficial? Lo dijo recientemente otro gallego, el cardenal Rouco Varela, que avisó que las redes sociales propician un estilo de vida "virtual" y "vacío". Manuel Bragado comparte en buena medida la preocupación de que Twitter puede llegar a idiotizar, al fomentar una lectura superficial, frente a los libros que él y otros editan. Pero no deja de ver el lado positivo: "Dejas que tus amigos orienten tu lectura entre lo inabarcable".