"El funcionamiento de los seres vivos se basa en procesos de reconocimiento molecular", ha añadido, en declaraciones a Efe, Avelino Corma, del Instituto de Tecnología Química (un centro mixto de la Universidad Politécnica de Valencia y el CSIC), y director de esta investigación, publicada en el último número de la revista Nature.

El descubrimiento significa que, por primera vez, se va a poder disponer de un material cristalino y nanoporoso con una mayor capacidad para reconocer moléculas.

Dicho de una manera sencilla, "este material tendría la capacidad de distinguir entre una mano derecha y una mano izquierda que, aun siendo iguales en tamaño y forma no se superponen, ya que una es la imagen especular de la otra", ha explicado el científico.

Uno de los temas de mayor interés en química es el reconocimiento molecular, mediante el cual una molécula "A" interacciona específicamente con otra molécula "B", incluso en presencia de un gran número de otras moléculas.

En este sentido, "el diseño de nuevos materiales capaces de interaccionar con una determinada molécula que se encuentra en presencia de otras permitirá separar a ésta de la mezcla e incluso hacer que reaccione mientras que el resto permanecen inalteradas".

Esta interacción, separación e incluso reacción selectiva se producirá si el nuevo material sintetizado es capaz de reconocer y diferenciar a la molécula deseada del resto de moléculas, a través de sus dimensiones y forma molecular, así como a través de interacciones químicas específicas.

Lo logrado por los investigadores del Instituto de Tecnología Química ha sido concretamente sintetizar un tamy reactividad de moléculas en química y en biotecnología.