Según el Instituto Nacional de Tecnologías de la Comunicación (INTECO), la última mutación del virus, llamada Downandup.C está previsto que se desarrolle y se fortalezca mañana miércoles, aunque algunas empresas de seguridad informática dudan de esa posibilidad debido a que mañana se celebra el día de los inocentes en Estados Unidos.

Aunque sus dos versiones anteriores son de baja peligrosidad, según el Centro de Alerta Temprana sobre Virus y Seguridad Informática (dependiente del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo), el parche MS08-067, creado por Microsoft como protección, no evita la infección de la nueva mutación.

El gusano afecta solo a sistemas que usen Windows, por lo que Microsoft ha ofrecido una recompensa de 250.000 dólares (194.000 euros) por cualquier pista que conduzca a la identificación, detención y procesamiento del autor del virus, cuyo origen podría estar en China.

Entre sus acciones, el virus impide el acceso a determinadas páginas de seguridad, elimina los puntos de restauración del sistema para dificultar su eliminación y inhabilita varios servicios de seguridad de Windows.

Entre las víctimas del virus, figuran el sistema informático del Parlamento Británico, varios centenares de ordenadores del Ejército Alemán o la intranet de la Marina Francesa.