Su autor, el profesor suizo Louis Palmer, arrancó su periplo en Lucerna (Suiza) en julio de 2007, y desde entonces ha conducido durante más de un año este coche impulsado únicamente con energía solar.

En este peculiar taxi, que no usa ni una gota de combustible, han viajado importantes personalidades, entre ellas el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon.

Como ha explicado el propio Palmer en numerosas ocasiones, el Solartaxi pretende concienciar a la gente y a los gobiernos sobre el problema del cambio climático y las distintas opciones que hay para combatirlo, "que están en manos de todos poniendo nuestro granito de arena".

La iniciativa "debería reavivar la esperanza y el entusiasmo por la vida, ser un ejemplo para contrarrestar la resignación y promover la reflexión" sobre el futuro de nuestro planeta, subraya su autor.