En una entrevista concedida a Efe, Silva, que actualmente vive a caballo entre Getafe y la población barcelonesa de Viladecans, cree que "Internet está llamado a influir en la literatura porque la Red es hoy espacio de comunicación y de vida para mucha gente".

Pensar, dice, que la literatura mantendrá esa postura refractaria frente a Internet le parece "ilusorio" y agrega: "Si la literatura quiere seguir contando la condición humana, tendrá que atender un espacio en el que la condición humana se desarrolla".

Tampoco cree que Internet esté degradando el lenguaje y, al contrario, piensa que fomenta una "mayor concreción de ese lenguaje y que los mensajes sean más sintéticos".

Según el autor de "La flaqueza del bolchevique", Internet tiene una "doble presencia" en gran parte de la historia que narra "El blog del Inquisidor" (Destino).

"Es el espacio en el que se desarrollan las relaciones de los dos personajes principales del siglo XXI, y además tiene presencia a través de sus estructuras narrativas literarias, en este caso la estructura epistolar (correo electrónico, mensajería instantánea y blog)".

La propia bitácora, añade, confiere al texto una estructura "fragmentaria", con diálogos, mensajes, trozos de novelas, de manuscritos, de historia, "y todo eso se incorpora a la literatura".

Al margen de que últimamente Lorenzo Silva ha colaborado con el cine y la televisión, el autor ha tardado dos años en escribir la novela porque ha necesitado "todo un trabajo de búsqueda de las voces y de investigación en archivos, de hecho hay una docena de páginas que son transcripción de un manuscrito del siglo XVII, que recoge el proceso inquisitorial contra las monjas", que está en el trasfondo de la trama.

La novela cuenta el proceso contra las 30 monjas de un convento, después de que 25 de ellas confesaran estar endemoniadas y fueran exorcizadas, así como el descargo que hizo la priora ante el tribunal, documentado en 40 páginas, en el que se defiende y finalmente consigue que la absuelvan.

Después de mucho tiempo de reflexión, Silva optó por "no hacer una novela histórica convencional, "en la que habitualmente un 20% es histórico y el 80 restante es relleno escrito desde el siglo XXI".

Silva opina que "la decisión adoptada es mejor, porque lo otro habría resultado una falsificación y una impostura" y sus propias especulaciones contemporáneas se vehiculan mejor a través de los personajes actuales que salen en la novela y que coinciden además en Internet.

Siguiendo el espíritu de "La isla del fin de la suerte" (2001), en la que invitó a los internautas a concluir la novela, en "El blog del Inquisidor" propone un "juego interactivo" para que los lectores inventen una historia con relación a "algo que los personajes no cuentan en la página 237, algo que no es decisivo para el final de la historia, pero que sí tiene importancia".

Después de haber obtenido una nominación a los Goya por su guión de "La flaqueza del bolchevique", su experiencia con el cine ha sido "lamentable", e incluso un guión de un 'thriller' que ha escrito después no ha tenido salida, porque "la industria española tiene pocos recursos y miedo al género negro".

Más grato ha resultado su contacto con la televisión, para la que ha escrito el guión de una miniserie sobre los últimos días de Franco. "Hace ocho meses me propusieron el guión y mañana se estrena en Antena 3".

Silva confiesa que lo que sí tiene claro es que no volverá a hacer una adaptación de una obra suya y, de hecho, comenta, ya no tiene nada que ver con la adaptación para la tele que se está realizando de sus novelas de Bevilacqua.

El autor ya ha comenzado la que será quinta novela de Bevilacqua, que se publicará en otoño de 2009, y que está inspirada en "un célebre homicidio real, aunque modificado".