Durante la maniobra, que tuvo lugar a las 04.56 horas (hora local), la nave, no tripulada, accionó durante cerca de dos minutos y medio su motor líquido de 440 Newton. Gracias a este impulso, el Chandrayaan-1 se incorporó a la trayectoria de transferencia lunar a una distancia de 380.000 km (el punto más lejano a la Tierra).

Ahora, desde las instalaciones del 'Spacecraft Control Centre at ISRO Telemetry, Tracking and Command Network' (ISTRAC) se vigila el correcto funcionamiento de la sonda, con la ayuda de las antenas del 'Indian Deep Space Network' (IDSN), en Byalalu.

El Chandrayaan-1 se acercará aún más a la Luna el próximo día 8 de noviembre; será entonces cuando su motor vuelva a encenderse para impulsar la nave por sexta vez hasta la órbita lunar.

Desde que despegara el pasado día 22 de octubre, ninguno de los sistemas de a bordo ha registrado algún tipo de incidencia.