Según informaron fuentes de la entidad en un comunicado, estos centros tecnológicos trabajan con "las últimas tecnologías, con empresas de todos los tamaños y en todos los sectores productivos, desde los manufactureros tradicionales hasta los de tecnología punta" y explicaron que, para Fedit, es "fundamental" que las pymes puedan acceder de forma fácil a servicios técnicos de apoyo a la innovación para que mejoren su posición competitiva en los mercados.

En ese sentido, Fedit se expuso como un "verdadero buque insignia del desarrollo económico y social desde la excelencia tecnológica transmitida a la competitividad de nuestras empresas". Para ello, explicaron que la Federación actúa en red con centros de todas las comunidades autónomas de España, lo que provoca "una gran agilidad en cuanto a transferencia de tecnología se refiere", algo que explicó como "una polea de transmisión de impulsos entre los centros e institutos tecnológicos que la integran y las empresas".

Asimismo, indicaron que las culturas empresariales difieren según los países, pero también según los sectores, ámbitos geográficos, el tamaño de las empresas y su localización. Sin embargo, añadieron, "los resultados sí son los mismos: las empresas son o no son competitivas, son o no son rentables, crecen, se contraen o desaparecen".

Precisamente, los datos de un estudio internacional de impacto elaborado por Fedit desvelaron que las empresas incrementaron un 56 por ciento sus ventas gracias a la investigación, desarrollo e innovación aportado por los centros tecnológicos, lo que repercute en la mejora de la facturación y los ingresos, así como en la creación de productos o servicios nuevos, optimizando los anteriores y aumentando la competitividad.

"El éxito del trabajo a través de las redes depende esencialmente del deseo común de un grupo de entidades intermedias y de empresas socias de la red que agrupan sus experiencias, aptitudes y habilidades individuales, aunque complementarias, para el beneficio mutuo", aseguraron.

Para Fedit, España se caracteriza por una gran desigualdad tanto territorial como sectorial, por eso, las entidades intermedias abarcan ciertos territorios, tecnologías y actividades, aunque todavía subsisten algunos vacíos al respecto. En este contexto, la Federación "amplía el potencial de intervención de estas entidades, reforzando su capacidad técnica y tecnológica sin cuestionar su especialización y habilidad de interconexión con las empresas, especialmente con las pymes".

Por ello, manifestaron que el desarrollo de las políticas científicas y tecnológicas "ya no puede abordarse desde una perspectiva local, sino que deben considerarse en un ámbito tanto regional como nacional e internacional", porque, según Fedit, "puede que la clave de todo se encuentre en el fortalecimiento de la interacción entre la totalidad de los agentes, proporcionando el marco adecuado para que ciencia y tecnología contribuyan de forma acelerada a nuestro progreso social y económico" ámbito en el que, matizaron, "Fedit tiene mucho que aportar".