Fuentes sanitarias han informado en un comunicado de este nuevo procedimiento en el que la técnica empleada es "más sensible y precisa", han señalado.

En concreto, el procedimiento está indicado "en la detección de tumores superficiales (que no llegan a la zona muscular), como son las lesiones papilares o el carcinoma in situ, que constituyen el 75 por ciento de los casos de cáncer de vejiga", han explicado fuentes del hospital Doctor Peset.

Una problemática añadida es la reincidencia del tumor pues, "casi la mitad de ellos vuelven a manifestarse", por lo que una estirpación más precisa que posibilita la nueva técnica "permitirá reducir las recaídas en este tipo de tumores".

La cistoscopia de fluorescencia con luz azul permite detectar hasta un 30 por ciento más de pacientes con cáncer de vejiga que la citoscopia estándard de luz blanca, según diversos ensayos clínicos europeos.

También la nueva técnica hace posible la detección de hasta un 67 por ciento más de lesiones de carcinoma in situ, "una lesión plana que puede ser difusa y difícilmente distinguible de una mucosa de apariencia normal si se usa la cistoscopia estándar con luz blanca", han explicado.

Durante el pasado año, el Hospital Doctor Peset tuvo que intervenir a 444 pacientes con cáncer de vejiga.

En este sentido, desde el centro han asegurado que el nuevo procedimiento permitirá que "uno de cada cuatro pacientes con tumor de vejiga confirmado reciba un tratamiento más adecuado, con terapias más efectivas".