Una guía, publicada por la editorial Paidós, sobre las principales disciplinas de la ciencia que explica asuntos tan trascendentes como el calentamiento global o la gripe aviar, pero también curiosidades fascinantes sobre cómo actúan las células del hígado al tomar un caramelo o qué ocurre cuando se derrite un helado.

Según la autora, "se trata de un libro para todos aquellos que quieran entender los grandes problemas científicos de hoy en día" y con el que pretende "desatar la belleza cinética de la ciencia para que cautive como debería".

También está enfocado "para aquellos padres que, alguna vez, han sentido pánico cuando alguno de sus hijos les ha preguntado cómo se formó la Tierra o qué es la electricidad", destaca Angier.

Para ello, la escritora afirma que ha entrevistado durante meses a centenares de investigadores: premios Nobel, miembros de la Academia Nacional de Ciencias, rectores de universidad, directores de centros de investigación e incluso científicos que fueran considerados excelentes profesores.

Angier explica que se ha centrado en las ciencias "duras" (física, química, biología y astronomía), ya que son "los temas que la gente considera más abrumadores y abstrusos, pero donde se han efectuado los mayores progresos y descubrimientos del último siglo".

Para acabar con la imagen de "la ciencia como algo difícil, ininteligible y propio de empollones", la autora hace uso de metáforas, juegos de palabras y asegura "ir al grano porque es la mejor manera de enseñar ciencia a los no científicos".

En este sentido, la autora incide en la importancia de que los ciudadanos tengan conocimientos científicos ya que, entre otros beneficios, dan lugar a "un voto más sabio y exigente hacia los candidatos electorales" y, por otro lado, "les protege contra supersticiones, ilusiones, juegos fatuos y fraudes".

Además, a su juicio, "es necesario entender cómo funciona la ciencia para tener una opinión fundamentada y participar en las decisiones sociales y éticas implicadas en estos temas".

Un ejemplo que expone Angier, en la introducción de su libro, es que si se produjese una pandemia de racionalidad y la gente calculase "las ridículas probabilidades de que les toque la lotería", dejarían de comprar cupones y "los políticos tendrían que recurrir a medidas extremas para reemplazar estos ingresos".

Un paseo guiado a través de los principios elementales del canon científico para acabar con la "tecnofobia" y entender la ciencia de una forma divertida, pero rigurosa.