Junto con los Psychedelic Furs, Talk Talk y tal vez Echo & The Bunnymen, los Immaculate Fools jugaron en una especie de liga intermedia del pop-rock de los 80, sin alcanzar el éxito mundial de otras bandas de la década, pero dejando una huella imborrable en muchos seguidores, que les siguen adorando treinta años después. Esta noche (21.00 horas) los devotos de las inmaculadas canciones de Kevin Weatherill tienen una nueva oportunidad para verle en el Auditorio del Pazo da Cultura de Pontevedra, como cierre del ciclo Sons Diversos.
"Wish you were here", "Come on Jayne", "So sad" y, por supuesto, "Immaculate Fools", son algunos de los himnos que el grupo británico recupera en su encarnación actual como sexteto dirigido por el guitarrista y productor Adam Fuest. Los cuatro éxitos sonaron en el concierto que ofrecieron el pasado 19 de septiembre en Ponteareas. La villa del Tea y A Pobra do Caramiñal fueron las paradas gallegas de la anterior gira de los "tontos inmaculados", que interpretan con aires más guitarreros y más folk las canciones que les hicieron célebres -sobre todo en España- hace más de tres décadas, cuando debutaron con el álbum "Hearts of fortune" (1985).
La producción imperante en aquellos años, con profusión de sintetizadores y efectos digitales, nunca satisfizo a Kevin Weatherill. "No estaba del todo contento con los discos. Sonaban demasiado grandiosos, demasiado distantes -ha explicado-. El sonido de los ochenta no era lo mío, no era realmente feliz, y siempre pensé que los discos podrían ser mejores".
Esa frustración está detrás del último trabajo de los Fools, "Turn the whole world down", un álbum que incluye versiones de clásicos del grupo con el nuevo sonido de Immaculate Fools, más orgánico, directo y visceral.
El citado Adam Fuest (guitarra), Phil Andrews (teclados), Christian Pattemore (bajo), Linda Lamb (coros) y Phil Redfox O'Sullivan (batería) completan junto a Kevin Weatherill (voz y guitarra) la actual formación de Immaculate Fools, que en directo ha contado con el apoyo de la violinista Helena Watt.
Kevin Weatherill es el único miembro original que permanece en la banda, de la que primero salieron los hermanos Andy y Peter Ross y posteriormente su hermano Paul Weatherill.
Tras la disolución del grupo en 1997, Weatherill, que había dilapidado gran parte de la fortuna ganada en sus años de mayor éxito, adoptó el alter ego artístico de Dirty Ray, y con él y su guitarra acústica actuó en numerosas salas de aforo reducido y pubs de Galicia. Incluso se echó una novia gallega.
El año pasado refundó los Immaculate Fools y actuó con éxito en Madrid y en Barcelona, antes de comprobar que sigue contando con una buena parroquia en Galicia.
Las entradas cuestan 18 euros anticipadas en Ataquilla.com y 20 mañana en la taquilla.
