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Sara Casasnovas: "Clara es una sonrisa frente al oscurantismo"

La actriz ourensana da vida a una prostituta con inquietudes literarias en "Palabras malditas", un drama ambientado en la Galicia de posguerra en el que el dolor se mezcla con el amor y la poesía. La obra llega hoy al Teatro Afundación de Vigo

"Mis palabras malditas son las mismas que me sacan espinas"

Miquel Ínsua y Luma Gómez acompañan a Sara Casasnovas en el elenco de "Palabras malditas", una obra escrita y dirigida por Eduardo Alonso que obtuvo el accésit del premio nacional Lope de Vega de Teatro 2014.

La actriz ourensana, conocida por series como "El Comisario", "Hospital Central" y "Amar en tiempos revueltos", así como por obras de teatro como "La noche de la iguana" y "Electra", interpreta a Clara Campos, una prostituta de la Galicia de los años 40 que conoce a un profesor experto en poesía francesa.

-¿Cómo describirías tu personaje?

-Clara es una sonrisa frente al oscurantismo. Una mujer prendida a una carcasa para sobrevivir que rompe a medida que toma aceptación hacia sí misma, a través de la poesía, que es parte de sus anhelos, de sus deseos, de su dolor. La pureza de Clara es algo que se va esclareciendo a medida que avanza la obra.

-Eduardo Alonso creó el personaje de Clara pensando en ti. ¿Cuál fue vuestra relación profesional antes de "Palabras malditas"?

-Conocí a Eduardo con veinte años interpretando a Julieta en una versión del clásico de Shakespeare que él dirigió. Desde entonces hemos mantenido una relación de amistad y en el personaje de Clara advierto cuestiones que atañen a nuestra relación, ocultos en la relación de los personajes, y que van mas allá de la palabra escrita.

-¿Te ha contado historias tu familia sobre la Galicia de la posguerra? ¿Te documentaste a través de libros o películas? ¿Cuál es tu impresión de esa etapa?

-El trabajo de campo que hice sobre la época se abastece de recuerdos de otros y formalismos que me transfiero a mí misma por intuición. En el escenario respeto o incumplo, según convenga, esa coherencia formal que implica una época, y vivo la realidad de los conflictos que aborda la obra desentrañando los valores que siento que el personaje pide desarrollar.

-Los falangistas son claramente los "malos" en esta obra. ¿Los protagonistas, Clara y Vicente, están también definidos políticamente? ¿Se corre el riesgo de caer en el maniqueísmo?

-Caemos en el maniqueísmo si consideramos bandos de buenos y malos. Procuro no juzgar como actriz, sino interpretar como personaje los conflictos internos y externos que supone la condición que se me ha sido asignada como personaje. Clara, más que posicionarse políticamente, opera para burlar barreras. Padece desamparo social y su manera libertina de ganarse la vida le trae complicaciones.

-¿Qué opinión tienes sobre la prostitución? ¿Eres partidaria de ilegalizarla o de regularizarla?

-A rasgos generales soy más partidaria de educar y regularizar que de ilegalizar. La prostitución es un tema amplio y no me siento cualificada para hablar de él con conocimiento de causa. En lo relativo a mi trabajo, que es una interpretación, me nutro de las cualidades o los rasgos de carácter, gestos o ideas que considero coherentes para servir en la escena a la riqueza de un conflicto que el espectador juzgará o no como le venga en gana.

-El personaje de Clara Campos tiene en común contigo la vocación literaria. Has escrito algún guión. ¿Continúas escribiendo?

-Escribo, mucho. Y, al igual que Clara, he sentido pudor en mis palabras escritas y las he roto. Un ideal en escena es que una palabra debe caer cuando el silencio ya no tiene nada más que decir y al ser pronunciada la piel del cuerpo se modifica. Me gusta pensar lo mismo a la hora de escribir, es algo parecido a lo que decía Clarice Lispector sobre el arte de la escritura, conquistar esa no-palabra para que la palabra al fin muerda el anzuelo. Mis palabras malditas son esas que me obligan a brotar una emoción antes de pronunciarlas, son las mismas que me sacan espinas. Malditas por lo inevitables. Al margen, tengo un par de guiones que continúo revisando en vistas a materializarlos en una película.

"Lo que me ocupa es mi proyecto como directora"

  • -La obra se estrenará en Madrid en mayo. ¿Es la prueba de que ha funcionado bien en Galicia?-La obra se acogió en el Teatro Español de Madrid antes de la gira gallega. Aquí el público ha acudido al teatro de forma generosa en lo que llevamos de gira y su respuesta en lo que a mí respecta se manifestó agradecida, eso siempre ayuda. Para el Teatro Español de Madrid la obra se traduce al castellano. Estaremos casi un mes representándola.-Las últimas representaciones previstas de "Palabras malditas" serán a finales de mayo en Ourense, tu ciudad. ¿Te hace especial ilusión acabar allí?-Siempre es un orgullo volver a Orense, y más a ese precioso Teatro Principal donde he tenido el gusto de actuar por primera vez hace más de diez años.-¿Qué otros proyectos tienes en el cine o en la televisión, al margen del teatro?-"Tercer grado" es una película en la que participo como actriz, que lleva unos cuantos premios a sus espaldas y que continúa proyectándose en salas fuera y dentro de España, pero sobre todo lo que me ocupa es mi proyecto como directora, "La chica del maletero", y "A forma das cousas", una obra de teatro estupenda con la que también estamos de gira por Galicia.-¿Cuándo podremos ver "La chica del maletero", tu primera película como directora?-Espero que pronto. Me arde en las manos.-¿Cuáles son tus aficiones lejos de los escenarios y de los platós?-Cantar, bailar o leer un buen libro sentada al sol.

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