El nuevo Galaxy llega a España // Samsung

Hay que reconocerle algo a los chicos de Samsung: son tenaces y nunca desfallecen. Y gracias a su tenacidad podemos afirmar sin temor a equivocarnos que estamos ante el mejor dispositivo jamás creado por la compañía coreana. Así de simple y así de claro.

Pero es que cuando hablamos de buenos, malos o excelentes teléfonos móviles no nos referimos a su capaciad de almacenamiento, la velocidad de su procesador o los megapíxeles de la cámara. Eso tan solo son alardes técnicos que, en muchas ocasiones, no mejoran el conjunto por sí solos. Afirmar que estamos ante un teléfonos casi pefecto es decir que por fin Samsung, completo, capaz de satisfacer a cualquier tipo de usuario, ya sea este un geek loco por destriparlo o un enamorado de los accesorios a quien poco le importa el rendimiento.

Tras varias semanas de uso diario, intensivo y sin piedad, el veredicto es claro: El Galaxy S7 -Edge en este caso- merece mucho la pena.

Viejo por fuera, nuevo por dentro

Lo primero que llama la atención al coger el Galaxy S7 Edge es que casi no se diferencia de su predecesor. Peso y dimensiones son casi idénticas, y el diseño exterior es exactamente igual. Casi uno diría que tienes el mismo teléfono. Pero no es así.

El nuevo dispositivo de Samsung, que ya está disponible en nuestro país, destaca por haber corregido todos esos fallos que tenía su predecesor y que, a día de hoy, son elementos casi imprescindibles en todo buen teléfono que se precie. Así es como la tan necesitada ranura para tarjetas microSD ha vuelto a hacer acto de presencia en la gama alta de Samsung. En la era del vídeo 4K -que este dispositivo es capaz de grabar- es más que necesaria la posibilidad de poder ampliar la capaciad de almacenamiento. Una ingeniosa bandeja permite que tanto la tarjeta nano SIM como la microSD se alojen en un mismo compartimento, permitiendo así que los más que cortos 32 Gb. de memoria interna del Galaxy S7 se puedan ampliar con 200 más en forma de tarjeta externa.

El Galaxy S7 es además resistente al polvo y al agua. Esta tecnología que ha popularizado Sony con sus Xperia Z se está imponiendo como una característica casi imprescindible. Nuestros smartphones se han convertido en un apéndice de nuestro cuerpo, y si nosotros somos resistentes al agua, ¿por qué no ha de serlo también nuestro teléfono?

La nueva cámara trasera incorporada en el S7 reduce sus megapíxeles de 16 a 12 con respecto al modelo anterior, pero el uso de una nueva tecnología denominada Dual Pixel permite captar imágenes con una mayor nitidez incluso en condiciones de menos luz. Y realmente es así. Hemos hecho varias pruebas y el resultado es sorprendente. Aunque sin duda alguna lo mejor de la nueva cámara es su sistema de enfoque, tan rápido que si lo comparamos con el del iPhone 6S Plus -el mejor que había hasta ahora- uno no sabría decir qué sistema de enfoque es más veloz.

Pero como en esta vida nada es perfecto, este teléfono tampoco lo es. Su elevado precio puede penalizarlo en las tiendas, y detalles como la falta de conexión USB Type-C ­-el que será el estándar en muy poco tiempo- provocan que a los chicos de Samsung todavía les quede trabajo por hacer para que el rizo sea perfecto. Y no se pueden dormir en los laureles porque esto no ha hecho más que empezar. La temporada 2016 no ha hecho más que empezar.