Si puedes triunfar allí, puedes triunfar en cualquier parte, como cantaba La Voz -Fran Sinatra, no el concurso- en su famosa canción "New York, New York". Eso es lo que intentan los dos protagonistas de "Little Galicia", la película de Alber Ponte que llega hoy por fin a la cartelera, tras haber sido rodada hace casi año y medio. Anunciada como "una comedia romántica en Nueva York", en realidad la acción transcurre en buena parte en Nueva Jersey, donde vive una importante colonia gallega -y donde nació, por cierto, Sinatra-, y secundariamente en la ciudad de los rascacielos. Pero es que en esta comedia de enredo nada es lo que parece.
VISADO tuvo acceso al visionado de la película, producida con la colaboración de Televisión Española, Televisión de Galicia y Estrella Galicia. La historia nos sitúa en Noia, donde una familia recibe la invitación para la boda de la hija de unos amigos de Nueva Jersey. Finalmente viajará el hijo de los invitados, tipo interpretado por el actor gallego Fran Grela, que borda su papel de caradura con encanto. El personaje de Grela, dueño de un videoclub, logra liar a un amigo, interpretado por el actor madrileño Gustavo Salmerón, para que le acompañe a un apetecible fin de semana en Nueva York. Su intención última es convencer a su crédulo amigo para que le suplante en la boda mientras él va a visitar a una hija ilegítima en un orfanato neoyorquino. Pero, insistimos, nada es lo que parece en una película que va de mentiras necesarias -no siempre piadosas- y en la que los planes cambian hasta desembocar en un desenlace inesperado. Hasta aquí podemos leer del argumento.
Alber Ponte, director y guionista de esta película y curtido en más de 80 cortometrajes y documentales, además de una TV movie, decidió intercambiar los personajes de Fran Grela y de Gustavo Salmerón cuando quedaban dos semanas para el inicio del rodaje y ya llevaban un año ensayándolos. Y no exagera al decir que acertó de pleno. Fran Grela lleva el peso de la parte cómica con una naturalidad impresionante. Su actuación es el principal sustento de la película, como lo fue la de Manquiña en "Airbag". Un pícaro y un Don Juan al que el tópico situaría en Andalucía, pero que es más gallego que el pulpo á feira y los pimientos de Padrón (presentes también en la historia, por cierto).
Una imagen de "Littele Galicia". // Numérica Films
Dos tramas
La película abarca dos tramas paralelas, lo que supone ver dos películas en una, según ha dicho Alber Ponte. La trama romántica está protagonizada por Gustavo Salmerón, que extrañamente no imita el acento gallego de forma perceptible en toda la película. Los gallegos José Ángel Egido y Mabel Rivera, ambos impecables a lo largo de todo el metraje, encarnan a los padres de la novia, interpretada por Paloma Bloyd, actriz española hija de madre asturiana y padre estadounidense, y a quien antes pudimos ver en "No habrá paz para los malvados" (2011) y en el programa Supermodelo de 2007. Completan el reparto Fermí Reixach -convincente emigrante gallego, pese a su catalanidad-, la guatemalteca Adria Arjona -hija del cantante Ricardo Arjona- y Víctor Mosqueira (Mofa e Befa), en un papel meramente testimonial.
La idea de la película, que ha sido acogida favorablemente en los pases previos, le surgió a Alber Ponte en 2007, tras entrar en contacto con la "Pequeña Galicia" de Nueva Jersey. En realidad, no hay una "Little Galicia" como sí existe la denominación popular de "Little Italy", por ejemplo, para el barrio italiano de Nueva York, pero sí es cierto que siguen viviendo muchos descendientes de gallegos en Newark. Es una mentira más, una falsedad necesaria para una historia en la que prácticamente ningún personaje dice la verdad.
Fran Gela, con Manhattan al fondo en una escena de "Little Galicia
". // N. F.
