Este libro es la historia en primera persona de Zak Ebrahim, hijo de un ingeniero industrial egipcio y una maestra norteamericana. Cuando contaba con siete años, su padre disparó y asesinó a un rabino y, ya entre rejas, se convirtió en uno de los coautores intelectuales del atentado con bomba perpetrado en el Word Trade Center en 1993. A raíz de estos hechos, el autor se pasó el resto de su infancia trasladándose de ciudad en ciudad, sufrió acoso escolar y tuvo que ocultar su identidad a todos aquellos que conocían la existencia de su padre.